Las imágenes muestran tres de las últimas inversiones realizadas por Costas en el Sureste de la Isla. De izquierda a derecha aparecen las playas de La Nea, en Radazul (El Rosario), Punta Larga (Candelaria), y Los Abrigos, en Los Roques (Fasnia). Ninguna optó a bandera azul. / DA

NORBERTO CHIJEB | Santa Cruz de Tenerife

Las playas y puertos deportivos canarios lograron este año 45 banderas azules, tres más que el anterior año, siendo la isla de Tenerife la que más aportó con 16 estandartes de la Fundación Europea de Educación Ambiental (FEE) en sus costas, aunque ninguna de ellas en el Sureste.

Desde Las Teresitas, en la capital, hasta el municipio de Arico hay nada menos que 55 kilómetros sin bandera azul, lo que no significa, de ningún modo, que no tengamos playas en esa costa, algunas de ellas, incluso, de reciente creación o rehabilitación a través de convenios con la Dirección General de Costas.

Tenerife ganó nueve banderas azules más que hace un año y Canarias fue muy bien valorada por los examinadores, al totalizar 42 de las 48 playas que habían presentado candidaturas.

Cómo lograrla

Son los municipios que cuentan con litoral los que solicitan la bandera azul a la Fundación Europea de Educación Ambiental (FEE), que es la que concede anualmente este distintivo. Ninguna playa o puerto deportivo puede obtener el distintivo de rango europeo sin haberse presentado antes, como el caso de casi todas las playas del Sureste de la isla de Tenerife.

La campaña de bandera azul se asienta sobre cuatro pilares fundamentales: calidad de las aguas de baño, el cumplimiento de la legislación ambiental y litoral, la limpieza y servicios relacionados con la seguridad de los usuarios e información y educación ambiental. Las playas del Sureste de la Isla de Tenerife no han optado a bandera azul porque es evidente que no cumplen con todos esos requisitos, algunas por la calidad de sus aguas, como son los casos de dos playas nuevas, la de Punta Larga y la de Radazul, por la aparición de peces muertos o malos olores por emisarios submarinos cercanos.

En concreto, en Radazul, las denuncias por suciedad y malos olores han sido frecuentes en lo que llevamos de año y con anterioridad, mientras que en Candelaria siguen a la espera de los análisis toxicológicos de unos peces que aparecieron muertos hace ahora una semana.

Servicios inexistentes

Tampoco han aspirado a bandera azul playas como las de El Puertito de Güímar y Los Abrigos, en Los Roques de Fasnia; en este caso porque sus servicios y el nivel de seguridad es deficiente, como ocurre también en las pequeñas calas del litoral de Agache o en las playas de Las Eras, Porís de Abona o Abades, con excelente calidad de agua, pero sin servicios para los usuarios, como la mayoría de las calas canarias, que pasan olímpicamente de ondear el azul.