
DAVID SANZ | Fuencaliente
Las madres de Fuencaliente salieron del encuentro de ayer con la viceconsejera de Educación, Manuela de Armas, con un cierto aire de decepción. Después de más de un mes de lucha, confiaban en un respaldo de la Consejería para conservar los dos primeros cursos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) en el municipio. Lo más que consiguieron es que la viceconsejera vuelva a replantearse esta propuesta tras la presentación de alguna alternativa.
Eva Hernández, que hizo de portavoz de la comunidad educativa, señaló que “la puerta sigue estando abierta y no vamos a dejar de luchar por lo que consideramos que es justo”. En este sentido, indicó que le han propuesto a Educación la alternativa de que en lugar de rotar los niños hacia el instituto de Mazo, sea el propio profesorado de la zona el que lo haga.
“Nosotros seguimos en la misma posición; y para tomar esta decisión no sólo hay que mirar el punto de vista económico sino también social. Fuencaliente es un municipio, no un barrio. Esperamos que se llegue a un acuerdo”, sentenció Hernández. La viceconsejera explicó que la decisión de sacar la ESO de Fuencaliente surge ante “una situación irregular”, donde “los primeros y los segundos deben estar en un IES y nunca en un centro de Primaria”.
Recalcó también que son 18 alumnos y necesitan tres profesores y el hecho de que “hemos puesto a disposición de las familias un transporte”, cuya ruta se ha personalizado.
De Armas destacó que va a considerar en estos momentos los aspectos más de carácter social que educativos sobre Fuencaliente, además de la propuesta de “coger flecos de otros centros”, con el que dotar de profesorado al colegio. “Para mí es muy importante la economía, por las circunstancias que vivimos en toda España, pero también es importante que la calidad educativa de los niños no se merme en absoluto”.
De ahí que advirtiera De Armas que “si vemos que con esos flecos de horarios no garantizan que los niños van a tener una educación de calidad, no lo haría”.