Una jornada completa. Si el viernes hubo trabajo y diversión en Las Teresitas, el sábado tocó senderismo con bocatas y bebidas en Chinamada, baño en la Punta del Hidalgo y almuerzo familiar para dar la bienvenida a los nuevos. / DA
JUAN S. SÁNCHEZ | Santa Cruz de Tenerife
Que el CB Canarias es un club diferente es algo que no se le escapa a nadie y que queda demostrado en todos los aspectos, sobre todo, en el deportivo, el humano y el social. Bien se le podía aplicar aquello de que es más que un club, en español.
Su forma de trabajar también difiere a la del resto de los clubes. Así, su preparador físico, Óscar Díaz es un especialista en enmascarar el duro periodo de puesta a punto con ejercicios y actividades que los jugadores agradecen y que se alejan de las rutinas habituales a las están acostumbrados los que llegan nuevos al club.
Si el viernes el equipo se ejercitó sobre la arena de la playa de Las Teresitas, el sábado cumplió con una jornada que se ha convertido en tradición. Y es que desde hace tres años, el grupo aurinegro recorre los diez kilómetros del sendero que lleva desde la Cruz del Carmen hasta la Punta del Hidalgo con parada para avituallar en el restaurante La Cueva, en Chinamada, casi a mitad del recorrido.
“Tenerife ofrece una gran cantidad de posibilidades”, cuenta el técnico, Alejandro Martínez, que ve estas iniciativas como algo positivo para la integración de los nuevos en la religión aurinegra y también para que los jugadores huyan de una preparación física rutinaria “que no es lo que más les gusta”. “Ahora, estaremos 15 días sin salir de la cancha y el gimnasio”.