JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

El inicio del curso escolar en Canarias no sólo ha venido marcado por los recortes y críticas del sector educativo hacia las políticas emprendidas por las administraciones central y regional. También ha sacado a relucir una cruda realidad de consecuencias impredecibles. Y es que, según apunta la directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Unicef España, “el 38% de los menores del Archipiélago viven en la actualidad por debajo del umbral de la pobreza”.

Esta cifra podría incluso aumentar en los próximos meses como consecuencia del sobrecoste que para muchas familias ha supuesto el referido inicio del curso, marcado por un notable aumento de los precios de los libros, el transporte, el comedor y hasta la acogida temprana, a la que muchos padres de las Islas han tenido que renunciar porque no pueden sufragarla.

Según la responsable de Unicef, “la población infantil es el colectivo más empobrecido y afectado por la crisis”, especialmente en comunidades autónomas como Canarias, donde la tasa de paro supera el 33%. Por ello, desde la Organización de las Naciones Unidas para la Infancia se ha instado al Parlamento regional y a las instituciones insulares a que pongan en marcha “estrategias urgentes” para luchar contra este problema.

En este sentido, Marta Arias explica que, según datos de Unicef, el 40% de españoles dice haber recortado los gastos en alimentación, “medida que siempre afecta más a los menores. También hay gastos de salud y educativos que se resienten, lo que hace, por ejemplo, que el 29% de los menores no acabe los estudios posobligatorios”.

“La pobreza infantil es mucho más acuciante entre las familias monoparentales y numerosas, siendo uno de cada seis menores canarios los que viven bajo el umbral de la pobreza pese a que trabajen dos o más personas de su familias”, agrega la directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Unicef.

Según la organización, en la actualidad en España casi 2.200.000 niños viven por debajo del umbral de la pobreza, siendo el colectivo más afectado por la crisis económica. La pobreza infantil, estabilizada durante años en torno al 24% de la población menor de edad, ha superado el último año el 26%, un porcentaje que está casi cinco puntos por encima de la media nacional en 2010 y que nunca se había alcanzado para esta franja de edad desde que se puso en marcha la Encuesta de Condiciones de Vida (2004).

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Preocupación y acción política

El Pleno del Congreso aprobó a finales de junio por unanimidad la primera proposición de esta legislatura que llega al Pleno con el consenso de todos los grupos parlamentarios, referida precisamente a la pobreza infantil. Los votos de todos los grupos dieron luz verde a una Proposición no de Ley (PNL) por la que la Cámara “se compromete a hacer del combate contra la pobreza en la infancia un asunto prioritario en esta legislatura”. La iniciativa fue debatida en el Congreso casi un mes después de que Unicef España presentara su informe sobre el impacto de la crisis en la infancia, que revela que más del 26% de la población infantil vive por debajo del umbral de la pobreza. Durante el debate, todos los grupos incidieron en lo “alarmante” de los datos que recoge el citado informe, en la “urgencia” de adoptar medidas y en la importancia de haber alcanzado un consenso frente a la pobreza infantil. El texto de la PNL instaba al Gobierno a impulsar y definir a través del Plan Nacional de Acción para la Inclusión Social 2013/2015 una hoja de ruta “que articule una estrategia de protección a la familia e infancia, promoviendo medidas a favor de la inclusión social”.

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