EUROPA PRESS | Las Palmas
El Círculo de Empresarios de Gran Canaria ha criticado la “inactividad” del Gobierno autonómico, así como que el “despilfarro público” continúe a pesar de que las familias y las empresas canarias han reaccionado con “agilidad” para adaptarse a la nueva realidad económica.
En una declaración institucional, el presidente del Círculo de Empresarios de Gran Canaria, Germán Suárez, ha señalado que en la Comunidad Autónoma se ha creado una “superestructura administrativa” que debe racionalizarse para que sea más eficiente, reduciendo aquellas empresas, organismos o fundaciones cuya actividad no sea necesaria o no pueda ser desempeñada.
Los empresarios han advertido de que la tasa de paro en Canarias, que se sitúa en el 33%, no se resuelve “engordando” la administración pública o creando nuevos costes y regulaciones a las empresas. “La solución pasa por dejar que los empresarios trabajen, facilitar que arriesguen su capital y dejar que saquen a relucir su creatividad y capacidad de trabajo para crear riqueza”, proponen.
La presión intervencionista del Gobierno regional sobre el mercado canario, según el Círculo de Empresarios, ha conducido a una situación “disparatada” que puede ser gestionada por los administradores públicos, a quienes se reclama que centren sus debates políticos en el Parlamento y dediquen sus esfuerzos a administrar “con celo” los ingresos que se obtienen de los trabajadores y empresarios.
A juicio de Germán Suárez, ha llegado el momento de buscar soluciones basadas en una “política realista” y en administradores públicos “responsables y cualificados” que sepan enfrentarse a la actual coyuntura, de manera que se pueda recuperar “cuanto antes” la estabilidad económica.
Estrategia de confrontación
El Círculo de Empresarios de Gran Canaria también ha lamentado la “estrategia de confrontación” que se está fomentando desde la Comunidad Autónoma con el Gobierno de España, ya que para crear las condiciones necesarias para generar inversión y empleo hace falta “arrimar el hombro, fomentar la colaboración y el diálogo”.
El Gobierno de Canarias, desde el punto de vista de este círculo empresarial, debe centrar parte de sus esfuerzos en acabar con la complejidad burocrática que existe en la Comunidad Autónoma, máxime cuando ha supuesto la pérdida de “innumerables” oportunidades de inversión para los empresarios.
Por último, los empresarios consideran inoportuno que desde el Ejecutivo canario se reclame mayores competencias al Estado y a la Unión Europea cuando se limita la actividad económica en el archipiélago en sectores como el turismo, sus puertos y aeropuertos, e incluso, en la extracción petrolífera en aguas cercanas a las islas. “Es inexcusable ponerse manos a la obra; le toca mover ficha al Gobierno de Canarias porque antes lo hicieron trabajadores y empresarios”, concluyen.