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Intersindical repudia la violencia policial y la complicidad de las autoridades universitarias en la represión a los estudiantes

DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife

Intersindical Canaria repudia tanto la actuación policial como la actitud de las autoridades universitarias en la represión a los Estudiantes Pre Parados que ha tenido lugar este miércoles en Las Palmas de Gran Canaria y exige responsabilidades a los causantes de estas agresiones. El sindicato hace un llamamiento a la población para que participe en la concentración que tendrá lugar el jueves a las 9:00 en el IES Cruz de Piedra contra los recortes en la educación y contra la represión policial.

En un comunicado, Intersindical Canaria señala que la inauguración del nuevo curso universitario en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria ha servido para demostrar algunas verdades evidentes, por una parte la miserable, ambigüa y cómplice posición sostenida por las autoridades universitarias que organizaron un inicio de curso inédito en el sentido de permitirle la entrada a políticos corresponsables de los mayores recortes en la historia de la educación pública y que están poniendo a la misma Universidad en peligro, mientras se le negaba el paso, paradójicamente, a los estudiantes, principales protagonistas del proceso educativo, y que mantienen una digna lucha por el derecho a la educación pública y contra los recortes.

El evento sirvió también para demostrar el recrudecimiento progresivo de la represión policial en la isla, puesto que ante el estupor de los presentes y de los propios periodistas, la Policía Nacional cargo con inusitada violencia contra el colectivo de los Estudiantes Pre parados que protestaban de manera pacífica por las subidas de las tasas y la retirada de las becas llevadas a cabo por el gobierno del PP. El saldo lamentable de la brutalidad policial fue de al menos cinco estudiantes con fuertes golpes que tuvieron que ser trasladados a urgencias y posteriormente a distintos hospitales de la ciudad para una mejor valoración de su estado, y varios heridos leves.

Una tercera constatación, esta última positiva, fue la de la enorme integridad y dignidad de los jóvenes estudiantes capaces de resistir la violenta agresión policial sin por ello abandonar la protesta hasta el final del acto.