EUROPA PRESS | Madrid
El PSOE ha reiterado este jueves su voto en contra de la convalidación del decreto de Reestructuración y Resolución de Entidades de Crédito en el Pleno del Congreso argumentando la falta de negociación por parte del Gobierno, así como la ausencia de soluciones tanto para los afectados por las participaciones preferentes como de los desahucios.
Así lo ha explicado el portavoz socialista de Economía en la Cámara baja, Valeriano Gómez, quien ha recordado que el PSOE votó a favor de la primera reforma financiera “por responsabilidad” pese a la carencia de diálogo, lo que se repitió en la segunda reforma, en la que se abstuvieron a la espera de la tramitación. “Han pasado más de dos meses y aún estamos esperando. Pero no esperaremos más, ya está bien. Aquí se acaba esta triste historia”, ha anunciado.
“Si el Gobierno ha decidido que en el peor lance económico de nuestra historia democrática no es el momento del consenso, será el momento de contestar estas medidas”, ha continuado, recordando a los ‘populares’ que “en Democracia las formas y los medios son tan importantes como el fin” y reprochando que los parlamentos alemán y finlandés hayan debatido el rescate español y el Congreso no.
Además, los socialistas también critican que el ‘banco malo’ que se crea con este decreto “costará a los contribuyentes” mientras no se da solución ni a los afectados por las preferentes y otros productos híbridos, ni por los desahucios.
“Ya sabemos que las preferentes estuvieron mal comercializadas, pero el Memorándum de Entendimiento (MoU) no puede ser excusa para no establecer alguna solución razonable para los ahorradores engañados. Y nos oponemos a que, más allá de una cortina de humo, no hayamos encontrado una solución a centenares de miles de personas afectadas por los desahucios mientras hay un millón de viviendas vacías. No tiene sentido este esperpento”, ha exclamado.
Gómez también ha reprochado al ministro que la crisis ha deteriorado enormemente la confianza de los ciudadanos en las entidades financieras, confianza que no se recuperará mientras no “pase nada en lo judicial ni haya respuesta desde lo político”.