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Eliminan los carros de caballos de Playa de Las Américas por ilegales

NICOLÁS DORTA | Arona

CARRO CABALLOS TENERIFE SUR
Los carros de caballos establecen varias rutas por las zonas turísticas del Sur. / DA

El servicio de carruajes de caballos para turistas de Playa de Las Américas se ha suprimido por ilegal. Ha estado funcionando durante más de diez años “con permisos precarios”, según ha confirmado a DIARIO DE AVISOS el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Arona, Manuel Reverón. El edil manifestó que “las dos empresas existentes no cumplían con los requerimientos que se les exigía” por lo que han decidido “suprimirlas”, y que había quejas, sobre todo del colectivo de los taxistas.

Así ha sido, el presidente de Radiotaxis Arona, Juan José Rodríguez Dorta, confirmó ayer que en ocasiones estos carros hacían competencia desleal, llevando a turistas a restaurantes y hoteles “sin los carros homologados y sin permisos necesarios”, dijo. Ambos han hablado de “problemas” entre las dos empresas de caballos, que se acentuaron en los últimos años.

El propietario de una de Las empresa en Arona, admitió ayer esta circunstancia pero insiste en que su intención es que “se saque a concurso este servicio”, sostuvo. Añadió que los problemas comenzaron cuando otra empresa “empezó a hacer unos recorridos que no son los que estaban acordados”.

Asimismo, el colectivo de vecinos Patrimonio Sur considera que tener a un animal por el asfalto es maltratarlo. Por ello, condena en su blog “la implantación y su sucesiva extensión de carruajes en zonas turísticas que vulneran los derechos de estos animales y dañan la imagen de un destino turístico como es el Sur de Tenerife”.

Rutas turísticas

Sin embargo el dueño de la empresa en Arona, que ha implantado lo mismo en Adeje, asegura que los animales “trabajan cuatro horas al día” y que “están en perfecto estado”. Insiste que en el municipio vecino de Adeje “tampoco es rentable”, por “permisos y seguros”.

En Adeje hay dos rutas turísticas por dos empresas diferentes. Ambas cuentan con todos los permisos necesarios y pagan al año al Ayuntamiento 7.400 euros y 3.700 euros respectivamente, según el recorrido.
El dueño de la empresa no especificó ayer cuánto cobra por el turista que se sube a un carro para que un caballo lo pasee.