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Los irregulares de Canarias sin tarjeta sanitaria son unos 40.000

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La nueva norma solo respeta la asistencia gratuita en urgencias. | EFE

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Asombro en el Gobierno de Canarias: los inmigrantes irregulares asentados en las Islas son cerca de 50.000, según se desprende del cruce de datos estadísticos oficiales. De ellos, unos 40.000 han sido excluidos de la tarjeta sanitaria a raíz de la entrada en vigor de la nueva normativa que les exige costearse la atención.

La cifra, cálculo que ya adelantó DIARIO DE AVISOS en su edición del pasado 31 de agosto, supone el doble de las previsiones efectuadas por el Ejecutivo autonómico. Sea como fuere, la intención de seguir dando cobertura sanitaria a todos ya ha sido reiterada por la consejera Brígida Mendoza.

A la espera de que la Consejería dé la cifra concreta, resultante del intercambio de datos entre el Instituto Nacional de Estadística y el Registro General de Extranjeros del Ministerio de Empleo, fuentes de toda solvencia detallaron el sorprendente dato, que es ampliable al resto del país, donde el total se acerca al medio millón de personas. Consultado al respecto un alto cargo de la Consejería, se limitó a recordar que, tal y como ya apuntó a este periódico en su momento, el seguimiento de todos los casos de enfermedad infectocontagiosa seguirá como hasta ahora, al estar considerado como una prioridad de la salud pública de los canarios. A este respecto, cabe recordar que los últimos casos dados en las Islas están provocados por turistas de países como el Reino Unido o Alemania.

Así, un niño inglés provocó un brote de sarampión que afectó a varios sanitarios, mientras que una alemana infectada en Hamburgo acabó ingresada en un hospital de Gran Canaria con el brote de E-coli durante la crisis sanitaria que costó la vida a decenas de germanos.

Facturas
En cuanto al resto, la Sanidad canaria se comprometió desde el primer momento a no dejar sin atender a nadie, aunque a los que no presenten tarjeta sanitaria se le facturarán los servicios. Algo bien distinto es que se lleguen a cobrar las facturas de los países del Tercer Mundo, claro está.

Según la nueva norma estatal, los extranjeros en situación irregular sólo tendrán derecho a ser atendidos en urgencias hasta que se les dé el alta, durante el periodo de embarazo, parto y posparto y a que los menores de 18 años reciban asistencia pediátrica en las mismas condiciones que los niños y adolescentes canarios. También perderán su condición de asegurados los españoles que nunca han trabajado y que tengan ingresos superiores a la cifra de 100.000 euros al año, los denominados “rentistas”.