EFE | Madrid

El titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, Adolfo Carretero, ha citado a declarar como testigo el 2 de noviembre a una madre que denunció que presuntamente le robaron a su hijo al nacer en la Casa de la Madre en 1978 en un caso en el que aparece implicada una monja llamada “sor María”.

La madre es Felisa Tomico, quien el próximo día 2 de noviembre ratificará ante el juez la denuncia por unos hechos ocurridos el 20 de abril de 1978 cuando ingresó embarazada en la Casa de la Madre, situada en el número 120 de la calle Goya de Madrid, han explicado a EFE fuentes jurídicas.

Tras un embarazo normal dio a luz el 26 de mayo de 1978 sobre las 14.15 horas y dos horas después del alumbramiento una monja llamada “sor María” le comunicó al padre que el recién nacido había fallecido, convenciendo a los presentes para que no vieran el cadáver.

Las deficiencias en la licencia de enterramiento, en la fecha del embarazo -al señalarse que era de ocho meses y medio cuando había cumplido los nueve- y la presencia en una habitación próxima de un matrimonio atento a la evolución del embarazo hacen sospechar la existencia de una sustracción del recién nacido y la entrega a terceros.

El juez cita a la denunciante después de que la Audiencia Provincial de Madrid reabriera este caso que había archivado el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid y le ordenara a éste que retomara la causa por los presuntos delitos de detención ilegal, suposición de parto, alteración de paternidad y falsedad en documento público.

En declaraciones a EFE, el abogado de Sos Bebés Robados Madrid, Guillermo Peña, ha explicado que, en este caso, habrá que aclarar porqué los datos de la licencia de enterramiento están en blanco y porqué no se han utilizado los modelos oficiales, aprobados en su día por el Ministerio de Justicia, para certificar la muerte del niño.

Peña ha señalado que el juez también tendrá que esclarecer porqué una señora que no tenía nada que ver con el hospital le preguntaba a la denunciante continuamente por su hijo, cómo estaba, cómo había salido, qué pensaba hacer y cuáles eran sus aspiraciones.

Según el letrado, la denunciante oyó hablar de una religiosa llamada “sor María”, que era una Hija de la Caridad, pero no puede asegurar que se trate de María Gómez Valbuena.

El titular del mismo Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid está punto de cerrar la investigación judicial en diligencias previas sobre el supuesto robo de una niña en la Clínica Santa Cristina de Madrid en 1982, en la que está imputada la religiosa María Gómez Valbuena, conocida como “sor María”.

Ahora, el juez tiene que decidir si continúa el procedimiento abreviado en fase de juicio oral o archiva el caso, después de intentar localizar a algunos testigos que no han sido encontrados, de los veintiséis que han sido citados a declarar en el proceso.