P. PÉREZ / A. LORENZO | Santa Cruz de Tenerife

La UD Norte cumple su vigésima temporada de forma consecutiva en la regional preferente tinerfeña, lo que le hace ser el club que más lleva en la categoría, de forma interrumpida, de los que compiten actualmente. Al frente de la secretaría del club, la figura de Jaime Pérez, cargo en el que ya lleva diez años, aunque, como él dice, lleva “toda la vida”. “Empecé como jugador y posteriormente como directivo, imagínate si hace tiempo, que ya tengo un hijo jugando en el equipo, Emilio”. De hecho el ascenso a la regional preferente fue la temporada siguiente a su retirada como jugador.

Siempre se ha asociado al equipo como modelo de gestión deportiva y económica, y muchos son los que quieren jugar en él. “Somos rigurosos, y nunca vamos más allá de nuestras posibilidades, por muy mediático que sea el estar en boca de todos por fichajes de relumbrón, que a la larga es pan para hoy y hambre para mañana”. “No hay secretos para el buen funcionamiento de la entidad, solo el trabajo incansable y de forma desinteresada de mucha gente, el apoyo del Ayuntamiento de Barlovento durante todos estos años, y demás instituciones públicas y empresas privadas”, agrega.

Su nombre siempre se asocia al conjunto de Barlovento, aunque su humildad le impide reconocer su encomiable labor: “Ni mucho menos el Norte es Jaime Pérez, es un equipo de gente que trabaja día a día por este Club, aunque permanezcan más en el anonimato que yo”.

Antes del comienzo de esta temporada pensó en dar un paso al costado. “Medité dejarlo, a causa de los difíciles momentos por los que pasa la sociedad y el deporte. La decisión de continuar viene alentada por un grupo de personas, entre ellos los responsables políticos del municipio, encabezados por su alcaldesa, Vanesa Rodríguez, que me animó a continuar con el proyecto. Desde la UD Norte damos las gracias por el esfuerzo que realizan y han realizado los mandatarios, actuales y anteriores, para que este club siga haciendo historia”.

El hecho de ser un municipio pequeño agrava la dificultad para poder sacar adelante las temporadas.

“Es muy complicado, -insiste Pérez- y más con la situación económica que vivimos, puesto que las puertas que tocas cada vez están más cerradas, y encima, esto sucede en un municipio pequeño, pero no queda otra que tirar de ingenio, y sobre todo, ser muy pesados”.

DUDAS PARA COMPETIR
Aún así esta temporada tuvieron muchas dudas de poder salir a competir. “No era ningún aviso, es una situación real en el fútbol regional, por mucho que nos empeñemos en tapar el sol con un solo dedo. Cada vez son más los obstáculos a saltar y cada vez menos las posibilidades de saltarlos”, argumenta.

Las veinte temporadas de forma consecutiva han dado para tener mejores y peores momentos, y tocar con los dedos la Tercera División en alguna ocasión. “Nunca nos lo hemos planteado como objetivo, aunque lo hemos tenido muy cerca, pero creemos que para asumir esa categoría hay que estar muy seguros, saber si con la infraestructura que este club maneja sería posible asumir una Categoría Nacional. Posiblemente, ahora no es el mejor momento para planteárselo”, advirtió.

Tantos años alrededor del fútbol le han dado para vivir muchas experiencias. “La vida de un club está llena de buenos y malos momentos, para mí los buenos momentos son aquellos en los que cada temporada consigues los objetivos, tanto en el plano deportivo como en el económico, en la que te quedas con la satisfacción del deber cumplido. Pero por citar uno, es indudable que el ascenso a la categoría Preferente con el amigo, Anis, de presidente y Toni Ayala de entrenador”, concluye.