Un accidente de Vettel en la primera vuelta con Bruno Senna (Williams) dio esperanzas al equipo del ‘cavallino’ pero el alemán consiguió aguantar los arreones y se hizo con el Mundial. / FOTOS: EFE

AGENCIAS | Santa Cruz de Tenerife

Vettel (Red Bull) se convirtió en el tricampeón más joven de la historia de la F1 al acabar sexto el Gran Premio de Brasil, en el que el español Fernando Alonso (Ferrari) fue segundo -por detrás del inglés Button (McLaren)- y se quedó a tres puntos del éxito.

Vettel, que sigue sumando récords en F1, pulverizó, con 25 años y 145 días, el de tricampeón, que detentaba hasta ayer el brasileño Ayrton Senna, fallecido en accidente en Imola durante el Gran Premio de San Marino de 1994 y que tres años antes había festejado su tercer Mundial a los 31 años y 213 días.

Al alemán le bastaba ser cuarto para encadenar su tercer título, siempre que Alonso ganase en Interlagos, donde Button -que conquistó en esta pista el título de 2009- logró su decimocuarta victoria en F1. El inglés se impuso por delante del asturiano, que hubiese festejado por tercera vez en la pista de sus dos títulos (2005 y 2006, con Renault) si, acabando en esa posición, Vettel no hubiese mejorado el octavo, en una carrera en la que el otro piloto de Ferrari, el brasileño Massa, fue tercero.

Vettel fue sexto y se proclamó campeón con 281 puntos, sólo tres más que Alonso, para muchos, ganador moral de un campeonato en el que optimizó los recursos de un monoplaza inferior al del germano y en el que sólo firmó sus dos ‘ceros’ al ser embestido por el francés Grosjean (Lotus) en la salida de Spa (Bélgica) y por el compañero de éste, el finés Kimi Raikkonen, en la de Suzuka (Japón).

Los dos Ferrari salieron bien, al contrario que los Red Bull. Massa -que había arrancado quinto- saltó al segundo y Alonso al cuarto, mientras que por delante Hamilton -que ayer finalizó su relación con McLaren con una retirada- mantenía el primer puesto desde el que arrancó.

LAS CLAVES

Cuatro curvas más adelante, el brasileño Bruno Senna (Williams) -que junto a Sergio Pérez (Sauber) acabó ahí su intervención en la carrera- se tocó con Vettel, que pegó un trompo y acabó la primera vuelta en último lugar, en unos primeros compases alocados en los que Alonso siguió escalando y llegó a ser campeón provisional en el segundo giro, cuando era 3º y el de Heppenheim estaba fuera de los puntos, mientras por delante se destacaban ambos McLaren.

La lluvia comenzó a poner resbaladizo el piso. Hamilton paró a cambiar al neumático intermedio. Alonso hizo lo mismo. Y Vettel le copió la estrategia al asturiano. Algo que se repitió cuando dejó de llover y en la 18 Lewis, Fernando y Seb regresaron al compuesto duro de seco. A 30 vueltas para el final, el inesperado Huelkenberg lideraba la carrera, Alonso era cuarto -detrás de los McLaren- y Vettel, séptimo. Siete giros más adelante, Huelkenberg perdió el liderato al dar un trompo que permitió a Hamilton tomar el liderato. El alemán intentó adelantarle de nuevo en la 55, provocando un toque entre ambos que dejó fuera de carrera al inglés. Button pasó a ser líder seguido de Alonso y Massa y con Vettel séptimo, pero Schumacher lo dejó pasar y el alemán acabó sexto, logrando su tercer título mundial en la F-1.

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Alonso: “El Mundial no lo hemos perdido en Brasil”

El español Fernando Alonso (Ferrari) ha afirmado en el circuito brasileño de Interlagos, tras acabar como subcampeón mundial de Fórmula Uno, que el título no lo perdió en el Gran Premio de Brasil, sino en otras carreras en las que la suerte no estuvo de su lado.

“Hemos perdido el campeonato, pero no ha sido aquí, en Brasil, sino en otras carreras en las que no tuvimos suerte, como cuando (el francés Romain) Grosjean te pasa por encima de la cabeza (en Spa), o cuando en Japón a Vettel sólo se le impuso una reprimenda después de una crono…”, recordó.

“Pero esto es deporte, y siempre un campeón que tiene más puntos que los demás”, señaló en la rueda de prensa posterior a la última carrera del año.

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UN SELECTO CLUB CON NUEVE MIEMBROS

El circuito brasileño traía grandes recuerdos a Fernando Alonso, ya que allí fue donde selló sus dos títulos, el primero a falta de dos carreras para concluir la temporada y el segundo en el último suspiro de su pelea contra el alemán Michael Schumacher.

Sin embargo, era Vettel quien lo tenía todo a favor para emular al argentino Juan Manuel Fangio y al propio Schumacher, los únicos pilotos que han logrado encadenar tres títulos mundiales a lo largo de seis décadas de competición. Por si fuera poco, el alemán de Red Bull se convierte en el piloto más joven en conseguirlo, sumando un nuevo récord de precocidad a su lista, en la que ya figuran los de campeón mundial, victoria, podio y ‘pole’.

No importaba el triunfador, si Alonso o Vettel, para que el Mundial de Fórmula 1, cuya primera edición se celebró en 1950 con victoria del italiano Nino Farina, tuviese un nuevo tricampeón, el más joven de la historia, que se convierte en el noveno miembro de este selecto club de pilotos legendarios.

Schumacher, que precisamente se retiraba este domingo, es el más laureado con siete entorchados (1994, 95, 00, 01, 02, 03, 04), seguido por los cinco del argentino Juan Manuel Fangio (1951, 54, 55, 56, 57) y los cuatro del francés Alain Prost (1985, 86, 89, 93).

Además, con tres títulos figuran los brasileños Ayrton Senna (1988, 90, 91) y Nelson Piquet (1981, 83, 87), así como el australiano Jack Brabham (1959, 60, 66), el escocés Jackie Stewart (1969, 71, 73) y el austriaco Niki Lauda (1975, 77, 84), todos grandes nombres de la competición a los que se une Sebastian Vettel.