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CC de La Palma, ante una oportunidad única – Por Serviola de babor

Dicen que a la diosa Fortuna o a la Ocasión la pintan calva, con un solo mechón de pelo, porque es difícil de atrapar ya que pasa a nuestro lado arrastrada por el río de la vida, y se ha de estar atento para atraparla. Los afiliados a Coalición Canaria de La Palma, que eligen en estos días a sus compromisarios para su V Congreso Insular, han de estar atentos a la ocasión porque la oportunidad es única.

De momento soy lo que se podría definir como una “corriente de opinión” individual, con vocación de aglutinar un colectivo que en el debate de la Ponencia de Estrategia Política, primero en cada Comité Local y luego en el Congreso, comparta un par reflexiones.

Un viejo político decía: “Hay dos maneras seguras de llegar al desastre: Una pedir lo imposible, la otra retrasar lo inevitable”. En el V Congreso Nacional de Coalición Canaria no se profundizó en la evolución del Partido y sus resultados electorales que son un indicativo de cómo nos valora nuestro pueblo. Es inexcusable que ese examen se haga en el V Congreso de Coalición Canaria de La Palma.

En la Palma hemos alcanzado cotas de apoyo electoral difíciles de superar e incluso de mantener. Y lo hemos hecho. Nuestra situación es estable, como lo prueban los últimos resultados en las Elecciones Autonómicas, Insulares y Locales. En algún municipio se nos censuró la gestión, pero en general obtuvimos mayorías, pese a nuestro largo período al frente de las instituciones y en un ambiente electoral que, por la crisis económica, valoraba el cambio más que la gestión. Quizá, todo hay que decirlo, en algunos casos, descuidamos las relaciones con la oposición que propiciaran un pacto postelectoral, pero nada hubo que hacer ante los esperpénticos pactos locales del PP y PSOE sin duda justificados por el inefable valor ético del “quítate tú pa poner me yo”.

La crisis económica, y su grave repercusión social, junto a la mala práctica política, la individual en cuanto a corrupción y la colectiva en cuanto llegar al poder a costa de lo que sea, está propiciando en la sociedad la idea que sobran los políticos y los partidos, ignorando que son elementos básicos en una democracia, que su desaparición aboca al totalitarismo y que su depuración depende fundamentalmente de la decisión personal muy bien meditada de todos al votar.

¿Y a quién votar? De nuestro Congreso tiene que transmitirse a los palmeros un mensaje rotundo en el sentido que Coalición Canaria de La Palma, sus afiliados, sus dirigentes, los cargos públicos electos y designados son diferentes del estereotipo del “político”, y por lo tanto fiables candidatos. Y como obras son amores y no buenas razones:
No sigamos pidiendo lo imposible: Coalición Canaria de La Palma apoyó el Pacto del Gobierno de Canarias con el Partido Socialista Obrero Español condicionado a que, en un plazo de tiempo razonable, se extendiese a las Corporaciones Insulares y Municipales apoyando a quienes hubiesen obtenido la mayoría. Dado que el plazo ha sido más que razonable y que, el pasado mes de octubre, el electo nuevo Secretario General Insular del Partido Socialista Obrero Español manifestó que respetará los pactos ya acordados por los Comités Municipales, incumpliendo el compromiso de su Partido, Coalición Canaria de La Palma debería retirar su participación en el Gobierno de Canarias, y, sólo para cumplir con su Programa Electoral, sus Parlamentarios apoyarán las políticas de Coalición Canaria Nacional.

No es una decisión que desestabilice la gobernabilidad de Canarias, ni siquiera una decisión significativa, pero sería un mensaje claro a todos los palmeros: No somos del tipo de políticos dispuestos a ceder en nuestro compromiso con La Palma por ocupar cargos producto de un pacto quebrantado.

No sigamos retrasando lo inevitable: Desde su fundación en 1993 Coalición Canaria se definía con un sentimiento nacionalista nacido desde cada una de las islas, pues si nuestra nacionalidad se fundamentaba en nuestro Archipiélago como territorio pequeño, fragmentado y alejado de nuestro entorno social, económico y político estatal y europeo, ese mismo fundamento era aplicable entre todas las islas en lo que se ha llamado doble insularidad.

Ese sentimiento nacionalista en que cada isla es primus inter pares, que se ha intentado denigrar al calificarlo de insularismo, ha dado pruebas, en un largo periodo de gobierno, que nuestro modo de entender el nacionalismo canario y la canariedad, ha desarrollado solidariamente todas las islas y logrado cotas sociales y económicas que parecían inalcanzables desde donde partimos, aunque parece que lo olvidamos.

Sin embargo en el V Congreso Nacional de Coalición Canaria una mayoría, exigua, pero que merece todo respeto, se decanta por un modelo de nacionalismo centralista, que antepone las voluntades personales a las decisiones mayoritarias de cada Isla. Se concibe Canarias como en un territorio continuo con un nacionalismo centralista, o casi elíptico porque parece tener dos focos, abocándonos al Pleito Insular viejo, pero aún vivo.

Esa evolución del modelo nos asemeja al de los partidos centralistas, y nos está conduciendo a que los palmeros nos valoren como a ellos: una sucursal férreamente dirigida desde una central de decisiones que no reside en La Palma. Este camino conduce al desastre, por lo que también debemos marcar diferencia, y consecuentemente, Coalición Canaria de La Palma debería viabilizar la opción de concurrir en las Elecciones Autonómicas con una lista electoral diferenciada, y que entonces pueda constituir su propio Grupo Parlamentario con su Portavoz, si alcanza el número preciso de Diputados. Aspecto, por supuesto, extensible a todas las islas, si así lo desearan.

Es otra decisión que no desestabiliza a Coalición Canaria, sino que pretende refundarla al integrarla en la realidad de nuestro territorio, que por dispersión, dimensión y distancia, origina el hecho diferencial del que, insisto, nace nuestro nacionalismo en el Estado e igualmente debe nacer en el Archipiélago. Sería un segundo mensaje claro a todos los palmeros:

No somos el tipo de partido obediente a una disciplina que no reside en la Isla. Somos un partido de esta Isla, que trabaja y decide en esta Isla y por esta Isla, integrado en una coalición de islas donde defendemos nuestro desarrollo, y solidariamente, el de todas y cada una de las islas de nuestro archipiélago y la gobernabilidad del Estado.

Esta especie de “carta abierta a quien corresponda” es un intento para que todos los lectores, los militantes y los simpatizantes, generen opinión en los compromisarios del V Congreso de Coalición Canaria de La Palma, para que en el debate con sus aportaciones, y este par de reflexiones que quizá alguno comparta, diseñen la estrategia del Partido, que quizá se encuentra ante una oportunidad única para evitar iniciar un camino al desastre al perder credibilidad e identidad. Un camino que no se ha trazado en La Palma.