
NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife
El concejal de Deportes y responsable del Distrito Suroeste de Santa Cruz de Tenerife, Hilario Rodríguez, se muestra enérgico al asegurar que “el Ayuntamiento de Santa Cruz tiene que plantearse muy seriamente la continuidad o la desaparición de los tagorores del distrito”, una afirmación que tiene que ver con el bajo nivel de respuesta que desde las distintas áreas municipales se da a los acuerdos, peticiones o, como en el caso del Suroeste, a la solicitud hecha para que se declare en situación de emergencia social a los barrios de los que es responsable Rodríguez.
“Si se apuesta por la continuidad, hay que potenciar tanto las competencias como el presupuesto de los tagorores, y, si lo que se intenta es mantenerlos para dar cumplimiento a la ley de las grandes ciudades pues tendrá se tendrá que cambiar el sistema o la forma de gestión que se pretende de los distritos”, afirma el edil.
Rodríguez continúa explicando que “vemos cómo los acuerdos que toma el Tagoror, en muchísimos de los casos ni siquiera obtienen una respuesta de los servicios municipales”. Dice el también responsable de Deportes que “si tuviera un órgano de gestión que obtuviera una correspondencia de los servicios municipales, ya sea la Policía, los de Seguridad Vial, Servicios Sociales o Infraestructuras, que dieran una respuesta y mantuvieran una comunicación con el distrito se podría solventar la falta de presupuesto”. Porque asegura Rodríguez que “me da igual tener dinero o no, lo que queremos es que si yo hago una propuesta porque el dinero lo tiene otro, como mínimo que me contesten, que me digan que sí o que no se puede hacer”.
Además, afirma, “los vecinos tienen una tolerancia tremenda y cuando les explican que dada la situación y el momento no se puede hacer, lo entienden y lo aceptan, pero lo que no se puede hacer es dar la callada por respuesta como está ocurriendo ahora”.
En el último Tagoror del Distrito Suroeste, todos los grupos en él representados llegaron al acuerdo de solicitar la declaración de emergencia social motivada por datos como que el 60% de la población de los barrios de la zona está en paro. “Es la zona española con más paro de España”, recuerda Rodríguez, quien se queja de que la única respuesta que ha obtenido a la petición del Tagoror es la celebración de una reunión, tras las fiestas navideñas, con el alcalde, José Manuel Bermúdez, y la concejal de Asuntos Sociales, Alicia Álvarez, a la que también acudirán los movimientos vecinales de la zona “para ver las medidas reales que se pueden tomar para paliar la situación de muchas personas que están viviendo una situación dramática”. Rodríguez recuerda que hay familias enteras en el paro y sin ayudas, niños que, como han detectado algunos colegios, van a la escuela sin desayunar. “Cosas como esas son las que están pasando en el Suroeste”, advierte el edil. La declaración de emergencia lleva aparejada la toma de medidas concretas como que se destina más presupuestos a los servicios sociales y que se aumente el número de trabajadoras sociales del distrito, una medida esta descartada por la concejala de Asuntos Sociales, ya que, “no podemos contratar más trabajadoras porque nos lo impide el decreto del Gobierno central”, señaló en una entrevista con este medio hace unas semanas. Entonces la edil afirmó que “todos los distritos están muy mal, aunque reconocemos que la situación del Suroeste es especialmente delicada y por eso vamos a potenciar distintas líneas de actuación para conseguir algún resultado”.
Mientras, Hilario Rodríguez hace hincapié en la labor que estas trabajadoras están haciendo. “Están desbordadas, son personas conscientes de la situación de muchas familias, pero que se ven a veces impotentes y por eso quiero agradecerles su dedicación”, afirma.
El concejal de Deportes señala que “si a toda esta situación le sumas que la lejanía entre el centro de la ciudad y el Suroeste, parece que agrava la situación, tenemos motivos más que suficientes para pedir lo que pedimos”. Admite el edil que la Oficina del Distrito se está centrando en solventar los temas sociales, con poco tiempo y recursos para otras cuestiones que también preocupan en la zona. “Este año hemos intentado solventar los temas sociales, apoyando a las familias, gestionando ayudas a través de las trabajadora sociales a las que muchas de estas personas ni siquiera habían acudido y también hemos parado muchos desahucios”, concluye.