VERÓNICA MARTÍN | Santa Cruz de Tenerife
Es algo que se sabía ya desde hace tiempo. El océano está incrementando su temperatura. Y zonas como Canarias pueden ser más afectadas por este fenómeno que otras. Ahora, ya empieza a haber datos fiables y sí: el mar de Canarias ha subido su temperatura mucho más de lo que se esperaba. En concreto, las previsiones científicas establecen que el océano global suba su temperatura en 0,6º C a final del siglo XXI. Pues bien, en Canarias la subida es ya de 0,3º C en solo 15 años.
Estos datos fueron dados a conocer ayer por los científicos del Instituto Oceanográfico Español (IEO) tras finalizar la campaña anual Raprocan. Justo desembarcando del buque oceanográfico Ángeles Alavariño, el investigador principal de este proyecto, Eugenio Fraile, explicaba que para poder hacer predicciones o asegurar si los cambios que estamos observando en el clima se deben a una tónica general o es algo singular de un año determinado, “necesitamos tener datos y poder compararlos con otros en una serie temporal amplia”. En este sentido, explica que entre Lanzarote y la costa africana hay un punto de control de salinidad, temperatura y otros valores que recoge desde el fondo marino hasta la superficie los datos cada dos horas. Una vez al año se recogen y se pueden analizar. Pues bien, ha llegado ese momento y las cifras, aún preliminares, son contundentes: la temperatura del océano está aumentando hasta cuatro veces más de lo predicho por los modelos climáticos.
El equipo científico del proyecto Raprocan llegaba ayer al puerto tinerfeño después de haber recorrido 1.200 millas náuticas en aguas de Canarias analizando, durante 26 estaciones de muestreo profundas (de 0 a 5.000 metros de profundidad), un total de 6.500 litros de agua. Tal y como explican en la información remitida por el IEO, “se midieron más de 40 parámetros físico-químico-biológicos como temperatura, conductividad, presión, velocidad de la corriente, oxígeno disuelto, nutrientes, pH, alcalinidad, carbono inorgánico total, fluorescencia, zooplancton, fitoplancton y bacterias, entre otros”.
Raprocan cuenta en esta ocasión con un equipo multidisciplinar de científicos y técnicos del Centro Oceanográfico de Canarias del IEO, de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, del Banco Español de Algas y de la empresa DC Servicios Ambientales, liderados por el científico titular del IEO Eugenio Fraile.
En datos concretos, los últimos modelos predicen un aumento de la temperatura del océano para finales de siglo de 0,6º C, mientras que las aguas Canarias están ya registrando aumentos de 0,26º C por década a 300 metros de profundidad, cuatro veces más de lo predicho, o incluso de 0,36º C por década a 870 metros de profundidad.
Ahora, ¿qué significa esto? Y ¿cómo puede afectar al Archipiélago? Eugenio Fraile asegura que responder a estas preguntas es la misión principal del proyecto Raprocan. “Tenemos ahora una serie de datos objetivos que son estos. Luego, habrá que ver cómo evolucionan porque puede ocurrir que el aumento de la temperatura siga en esta progresión, que se paralice o que disminuya. Cualquier cosa es posible”.
Eso sí, ya hay consecuencias directas y los científicos recalcan la relación entre la temperatura y el resto de valores físico y químicos del océano con el clima canario. A más temperatura es posible que se vea afectada la corriente fría de las Islas Canarias que hace que el Archipiélago no refleje el clima desértico que existe a unos pocos cientos de kilómetros de nuestras costas. También es posible que las Islas sigan viviendo esta especie de tropicalización que subjetivamente todos padecemos: más olas de calor y más fenómenos lluviosos extremos.
Todo ello seguirá siendo monitorizado por el departamento de Medio Marino del Centro Oceanográfico de Canarias del Instituto Español de Oceanografía que creó en el año 2006 el proyecto Raprocan (Radial Profunda de Canarias). El objetivo principal de este proyecto es sistematizar una radial profunda de muestreo al norte de Canarias junto con el mantenimiento de una estación fija entre Lanzarote y la costa africana (EBC, Eastern Boundary Current).