VICENTE PEREZ | Santa Cruz de Tenerife
Los cuatro líderes sindicales que desde la tarde del martes mantenían su encierro en el Edificio de Usos Múltiples II de la capital tinerfeña han abandonado su protesta en torno a las 13.00 horas de este miércoles, a la espera de que mañana los principales sindicatos decidan si continúan con las movilizaciones para que el Gobierno canario dé marcha atrás a determinados recortes en servicios públicos e inversiones en los presupuestos de la comunidad autónoma para 2013, cuya aprobación está prevista para la próxima semana.
En concreto, se trata de Juan Jesús Arteaga, secretario general de CC.OO. en el Archipiélago; Eugenio Padilla, secretario general del FSOC en Tenerife; Candelaria Cruz, de Co.bas Canarias, y Mari Carmen Porcell, de Intersindical Canaria (IC). Los cuatro pasaron la noche en el interior de Usos Múltiples II. Hasta las 23.00 horas hubo una concentración con igual fin frente a esta sede de diversas consejerías del Gobierno canario, próximo al edificio de Presidencia, un acto en el que también intervinieron varios cantautores, según Arteaga.
El dirigente de CC.OO. ha explicado que se ha tratado de un “encierro simbólico” y avanzó que el frente que forman 18 sindicatos contra los recortes de los presupuestos públicos debatirán mañana por videoconferencia el resultado de las protestas conjuntas realizadas y si se convocan nuevas movilizaciones en común para los próximos días.
A su juicio, el próximo presupuesto autonómico “está condicionado por una premisa errónea, la de cumplir sí o sí los objetivos de déficit, cueste lo que cueste”, reduciendo inversiones y empeorando servicios públicos. En su lugar, ha señalado el secretaro general de CC.OO., su sindicato y UGT han planteado al Gobierno que no cumpla este objetivo a rajatabla, y que aumente impuestos como el del IRPF a las rentas de más de 60.000 euros e implante una ecatasa a los turistas para financiar el mantenimiento de los parques nacionales, entre otros atractivos turísticos relacionados con el medio ambiente en Canarias, un tributo, dijo, que, planteado así, no tiene por qué generar rechazo entre los turistas.
Arteaga auguró que en 2013, con unos presupuestos “tan antisociales” aumentará aún más la conflictividad laboral en las Islas y las protestas conta el Gobierno canario.