EFE |Madrid

Los sindicatos han alcanzado hoy un principio de acuerdo con la dirección de Iberia para abrir un proceso de negociación sobre el plan de reestructuración presentado por la aerolínea, que preveía el recorte de 4.500 empleos, por lo que han descartado convocar huelgas a partir del 7 de enero.

El preacuerdo fue anunciado al término de la reunión mantenida en la sede del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) por representantes de la dirección y de los sindicatos CCOO, UGT, USO, Sticpla, Asetma y CTA Vuelo.

En el acuerdo, en cuyo texto no hay mención a esos 4.500 empleos que la aerolínea planteó en noviembre que debían recortarse, Iberia se compromete a aplicar el ERE 72/01 como instrumento prioritario para solventar “el posible excedente laboral de Iberia operadora”.

Al hacer el anuncio, los representantes sindicales han explicado que Iberia ha aceptado la propuesta de los sindicatos de que el horizonte de aplicación del plan se amplíe de 2015 a 2017.

“El año 2017 nos parecía una fecha mucho más realista para intentar conseguir los beneficios que planteaba Iberia, que la del año 2015, que era una fecha demasiado forzada y que evidentemente nos hacía suponer que estábamos ante un plan que no tenía futuro”, ha dicho el secretario federal del sector aéreo de UGT, Francisco Rodríguez.

En un comunicado, Iberia ha destacado que en la reunión ha ratificado su voluntad de utilizar con carácter prioritario el mecanismo de las prejubilaciones para la reducción de plantilla prevista, “vía por la que pueden acogerse un mínimo de dos tercios del total de excedentes”.

La compañía también contempla en su negociación otras fórmulas como bajas incentivadas, recolocaciones o movilidad geográfica, añade la nota.

“Hay que reconocer que la posición que traía la dirección era radicalmente distinta a la del otro día. Hoy nos hemos encontrado con una dirección mucho más flexible, abierta a negociar”, ha añadido Rodríguez en declaraciones a la prensa.

Al ser preguntado por qué había podido ocurrir para ese cambio de actitud, el representante aseguró que si ha sucedido algo, “habrá sido en el seno interno de la empresa”.

Por su parte, el director de Recursos Humanos, José Luis Romero, ha asegurado a la prensa que “no ha habido ningún cambio” que les haya hecho cambiar, “sino la voluntad de llegar a acuerdos y empezar a negociar”.

“El Gobierno está mandando mensajes de que hay que hacer esfuerzos y nosotros (los) hemos tomado. El consejero delegado ya lo dijo, que íbamos a ser flexibles, que esos esfuerzos se iban a hacer, y estamos atentos a las peticiones que hacen todos los estamentos”, ha añadido Romero, para quien “todo el mundo estaba deseando que esto empezara”.