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Los empresarios proponen rebajar el IRPF del trabajador

   

Empresarios de la Cámara de Comercio y CEOE-Tenerife presentan el documento del REF. | DA

Empresarios de la Cámara de Comercio y CEOE-Tenerife presentan el documento del REF. | DA

M. FRESNO | Santa Cruz de Tenerife

Los empresarios de la provincia de Santa Cruz de Tenerife se han unido para consensuar un documento de reforma del Régimen Económico y Fiscal (REF) que deberá entrar en vigor el 1 de enero de 2014 y en el que proponen que las rentas de trabajo hasta los 33.000 euros, que suponen el 86,3% de los contribuyentes en Canarias, se beneficien de una menor tributación. Esta medida también se trasladaría a los autónomos por la misma cantidad.

Así lo anunciaron ayer el vicepresidente de la Cámara de Comercio, Santiago Sesé, y el presidente de CEOE-Tenerife, José Carlos Francisco, quienes acompañados del catedrático de Derecho Financiero y Tributario de la ULL, Salvador Miranda, redactor del documento, defendieron una reforma del REF de “máximos”, sin tener en cuenta las limitaciones presupuestarias.

Sesé explicó que el objetivo del documento es acabar con la idea de que el REF es solo para “ricos y los empresarios” y profundiza en su parte económica, es decir, en “aumentar la renta disponible en las familias para incentivar el consumo como medio para salir de la crisis económica”. Esta bonificación del IRPF está vigente en Ceuta y Melilla, en un porcentaje del 50%, pero en el caso de Canarias no tiene por qué ser en la misma proporción.

“La gente no tiene dinero, por lo que no hay consumo, y eso es malo para las empresas y para el empleo. Menos retención fiscal, más dinero en la calle, más consumo, más empresas y más empleo”, detalló Miranda. “El resto de la tributación se hará igual hasta los 33.000 euros y las ganancias, igual que en el resto del territorio nacional”.

La merma de recaudación por este descuento, que perjudicaría a la administración más próxima, que es la administración canaria, “se compensaría con los ingresos fiscales adicionales derivados del incremento del consumo y de la actividad empresarial y del empleo”, explicó el presidente de la patronal tinerfeña.

José Carlos Francisco reconoció que se trata de un “mal momento” para negociar un documento como este, pero es “el único que hay” y pidió unidad entre todos los sectores económicos para ir con el texto “consensuado” para que Europa dé el visto bueno. “Es el punto más importante de la agenda política de 2013”, recalcó.

Miranda reconoció: “Estamos en un momento en el que la administración canaria busca ingresos rápidos por todos los medios”. Pero recordó también que antes que decir no a este texto es importante “abordar una racionalización profunda de las estructuras administrativas” para eliminar duplicidades y una reducción del sector público canario para que “no se drenen los recursos fiscales” en su propio sostenimiento administrativo. El objetivo principal de esta medida es incentivar el consumo interno para reactivar la economía y generar empleo, pero también para acabar con el “déficit de legitimidad social” con el que cuenta el REF. En este sentido, tanto Santiago Sesé como José Carlos Francisco indicaron que “no se ha sabido transmitir ni ilusionar a la sociedad de la idea de que son todos los canarios en su conjunto los favorecidos por el régimen fiscal especial”.

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LA RIC, TAMBIÉN PARA EL COMERCIO

Otra de las propuestas que debe ir acompañada de este beneficio fiscal es la de mantener la Reserva de Inversiones (RIC), pero eliminando restricciones a su dotación y materialización. Miranda indicó que la crisis económica y el restrictivo sistema actual han llevado a que la dotación para la RIC se haya desplomado desde 2.700 millones de euros en 2006 a los actuales 600 millones, lo que supone menos inversión en la economía de las Islas. Por ello, los empresarios reclamaron ayer más seguridad jurídica en la aplicación de la RIC. Pero lo más novedoso es que, igual que se hace actualmente para la rehabilitación de la planta alojativa, se puedan acoger a la RIC los empresarios y arrendatarios de los inmuebles que se rehabiliten para el comercio. Además, proponen que las bonificaciones se extiendan a las energías renovables, y que, además, no se condicionen esos beneficios a la percepción de otro tipo de subvenciones, como se hace ahora, en el actual marco.

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