EUROPA PRESS | Santa Cruz de Tenerife
El consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad del Gobierno canario, Francisco Hernández Spínola, reconoció que el recorte de jornada y salario a más de 3.000 empleados públicos es “controvertido”, per ha permitido mantener puestos de trabajo.
El consejero socialista señaló que el Ejecutivo cree que hay “razones objetivas” para salvar la legislación actual y la directiva de la Unión Europea que impide la discriminación, y en todo caso, cree que es una medida “interpretable”.
“Si la alternativa es despedirlos, es mejor que tengan empleo porque si los expulsamos de la Administración no van a conseguir trabajo; la razón de ser de esta Consejería es defender el empleo público, y la reforma laboral del Gobierno central promueve ERE extintivos”, dijo.