EFE | Las Palmas de Gran Canaria
El remero portugués auxiliado cuando viajaba hacia Canarias en un bote para tratar de cruzar el Atlántico en solitario llevaba ya tres días a la deriva sin poder gobernar la embarcación cuando pidió ayuda a Salvamento Marítimo, ha informado hoy esta sociedad estatal.
El único ocupante del bote Paraguaçú, de siete metros de eslora, se llama José Tavares según se aprecia pintado en la cubierta de su nave en unas imágenes que ha facilitado a primeras horas de esta tarde Salvamento Marítimo, que le prestó ayuda después de que ayer pidiera auxilio cuando estaba en alta mar, en un punto situado a 70 millas náuticas (129 Km) de Fuerteventura.
Una embarcación de rescate salió al encuentro del remero, que pidió ayuda por presentar un estado de agotamiento físico que le impedía seguir avanzando como consecuencia de que tuvo que afrontar solo y en el mar los efectos del temporal que en los últimos días había azotado las aguas por las que transitaba, según han explicado a Efe fuentes de la sociedad estatal.
Salvamento Marítimo organizó desde su Centro Coordinador de Las Palmas de Gran Canaria la operación de auxilio al aventurero, que se inició cuando solicitó ayuda sobre las 13.30 horas del miércoles y finalizó sobre las 2.00 de esta madrugada, hora en que fue desembarcado, sano y salvo, en la capital de Fuerteventura, Puerto del Rosario.
Tavares fue llevado hasta allí por el buque de rescate “Guardamar Talía”, que fue en su busca y lo remolcó rumbo a Fuerteventura.
La idea inicial de José Tavares era, en todo caso, seguir rumbo desde Canarias hacia América haciendo escala en Cabo Verde, según han precisado desde Salvamento Marítimo.
El propio remero anuncia hoy en su blog que tiene intención de seguir con su aventura en cuanto complete unas pequeñas reparaciones.