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Víctor Camacho: “Pintar es una evasión para mí”

   

LUIS DE LA CRUZ | Puerto de la Cruz

Víctor Camacho es psicólogo de profesión y pintor de vocación. | J.G.

Víctor Camacho es psicólogo de profesión y pintor de vocación. | J.G.

54 años lo contemplan: psicólogo de profesión y pintor de vocación. Víctor Camacho Martín se ha convertido en uno de los artistas de moda. Sus obras hacen un recorrido por la naturaleza. Da rienda suelta a su imaginación y fantasía e invita al gran público a disfrutar con cada una de sus piezas.

Su primera exposición en la coqueta Arte Galería fue un éxito y llegó de la mano de Nuria Segovia para la que el artista portuense, al igual que para los propietarios del estudio, solo tiene “palabras de agradecimiento”. “Me acogieron muy bien y todo fueron facilidades para exponer”, añade. Tiene muchas peticiones y, en la actualidad, participa en una colectiva en el Restaurante El Templete del Médano, aunque Camacho tiene muy claro varias cosas: “Pintar es una evasión; me recreo en los mundos y submundos de la imaginación. Pintar es, sin duda, el estado evasivo que mejor se puede tener”.

Además, agrega: “Desde que pinto, lo único que busco y lo más importante de todo es que la gente disfrute del momento; que devore la obra y que le busque el significado que quiera darle a la misma. Si lo consigo soy muy feliz porque no solo pinto para mí, sino para los demás. Pintar también es compartir todos los momentos que me ha tocado vivir”.

A medida que apura un café en una céntrica terraza de Puerto de la Cruz hace hincapié en que “todas” las obras que posee “son un paseo por la naturaleza de los diferentes paraísos que tiene nuestro Archipiélago, tanto por tierra como por mar”.

Sobre el impacto mediático que ha tenido su exposición, un recorrido por sus diferentes etapas como pintor y la aceptación popular de su pintura indica: “Estoy impresionado y agradecido porque siempre he pintado para mí y para los amigos, pero ahora tengo más responsabilidad, aunque seguiré pintando para disfrutar y buscar refugios de nuestra naturaleza, que todavía me quedan por descubrir”.

En realidad, la fama de Víctor Camacho como pintor para el gran público es reciente, sin embargo, como psicólogo es uno de los más afamados del Archipiélago.

Comenzó su andadura profesional en 1983 como director del Centro Comarcal de las Toxicomanías de Puerto de la Cruz, donde hizo escuela y creó un gran equipo. Más tarde, formó parte del primer equipo del Centro de Servicios Sociales de Puerto de la Cruz y en la actualidad está adscrito al área de Empleo de dicho Ayuntamiento. Sobre su trabajo, recalcó que “siempre es un placer ayudar a los demás”. Por ello, “un simple gracias por parte del usuario te reconforta y te da energía para seguir ayudando a los demás e intentando dar respuesta a los problemas que llegan a tu mesa”.

Este afán creativo ha conducido al reconocido psicólogo a unir al trabajo en la administración y a su faceta artística otra en el ámbito de la psicología, ya que también cuenta con una consulta privada en plena Rambla de la capital tinerfeña. “Lleva tiempo abierta. Atendemos casos de todo tipo -remarca- y la filosofía sigue siendo la misma: ayudar a los demás y que la gente se quede contenta. Para ello le solicitamos que nos trasladen su problema y ponemos todo el cariño y el empeño en resolverlo”.

Camacho no deja de ser una caja de sorpresas y habla de su etapa como músico. “Durante la época de la transición formé parte del grupo Raíces, junto a mis amigos Christian y Julio García; disfrutamos mucho”.

Por tanto, se le puede definir como una persona creativa, muy humana y con una enorme capacidad para sorprender a los demás.