GABRIELA GULESSERIAN | La Matanza de Acentejo
El alcalde de La Matanza, Ignacio Rodríguez, anunció ayer que trasladará su rechazo a subir el impuesto de bienes inmuebles (IBI) -la contribución urbana- como pretende imponer el Gobierno central porque ello agravará aún más la crisis económica y porque, además, el Ayuntamiento que dirige “está saneado”. El alcalde pide volver al tipo impositivo del 0,4% y no prolongar un año más el 0,5, pues inicialmente esa intención “iba a ser transitoria, pero ahora no sabemos cuánto se mantendrá”.
Por ello, y dado que las mociones y los escritos remitidos desde el Ayuntamiento al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y a la Gerencia Territorial del Catastro “no han servido hasta la fecha para remitir este tipo de pautas generalistas”, el grupo de gobierno (PSC-PSOE) presentará una moción al próximo pleno de la corporación que se celebra el viernes, para solicitar el apoyo del resto de grupos al objeto de que no se siga perjudicando a las familias matanceras. El acuerdo adoptado se trasladará al Parlamento de Canarias y a las Federaciones Española (FEMP) y Canaria de Municipios (Fecam). Ignacio Rodríguez ofreció una rueda de prensa junto al concejal de Hacienda, Sergio Lucas Hernández, en la que también mostró su desacuerdo con mantener los mismos valores catastrales que en 2004.
“Es imposible que las viviendas tengan el mismo valor en pleno boom inmobiliario que en esta crisis. No se puede estar tan lejos de la realidad”, manifestó.
BUENA GESTIÓN
Al respecto, opinó que “es necesario dejar un margen para que aquellas administraciones que no han derrochado, han gestionado bien y han cumplido con la Ley de Estabilidad Presupuestaria, como es el caso de La Matanza, puedan dar un alivio a sus vecinos”. El mandatario local también recordó que en 2009, el Consistorio norteño adoptó medidas reales para paliar los efectos de la crisis, como congelar las tasas e impuestos municipales, a excepción de la basura debido a que así se establecía por ley. “Siempre hemos sido bastante moderados en el gasto y ahora nos vemos obligados a soportar esta injusticia”, declaró la misma fuente.