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Carmen Luisa Castro: “Si Tita hubiese estado en mi lugar, habría hecho lo mismo”

   

NORBERTO CHIJEB | Güímar

CARMEN LUISA CASTRO

FOTO: SERGIO MÉNDEZ

-Ya tiene el bastón de mando. ¿Llegó a imaginar este momento?

“Cuando una lleva una trayectoria y una experiencia sin discontinuidad y con pocos descansos, cuando una conoce y sabe del funcionamiento y de los departamentos que componen el Ayuntamiento, es normal, en algún momento imaginar llegar a ser alcaldesa. Lo que ya no me gusta tanto es llamarlo bastón de mando. Yo siempre he pensado que el puesto político no es un cargo para mandar. Nada de eso, al contrario, es un puesto para dar un servicio a la comunidad”.

-¿Le molesta que digan que usted será quien lleve los galones, pero será Javier Mederos quien lleve el mando?

“En estos días se han dicho muchas cosas, muchas de ellas son fruto de una polémica insustancial que, ante todo, lo que buscaba era la bronca y la confusión. Pasado el vendaval puedo decirle ahora que esas afirmaciones son infundadas. Javier Mederos y yo ya estuvimos en un pacto y nos conocemos. Va a ser cómodo trabajar con él de nuevo, y aquí nadie va a llevar ni galones ni mandos. Es un lenguaje que no me gusta emplear, aquí trabajaremos en conjunto, y bajo pacto, para ofrecer a Güímar otros modelos y otras salidas”.

-Se le acusa de falta de carácter.

(Risas) “A mi me da la impresión de que detrás de esa acusación -hecha muy a la ligera por cierto- hay un machismo latente. Parece como si por el hecho de ser mujer, y una mujer dedicada a la política, no sólo tenga que demostrar que valgo, sino que valgo todavía más que si fuera un hombre. A mi no me falta carácter, me sobra tranquilidad. Un exceso de carácter me llevaría al autoritarismo. Sin embargo, con la tranquilidad ofrezco un talante dialogador y una cautela que deben ser necesarias, junto con la responsabilidad y el compromiso. Insisto en que la falta de acuerdos y el progresivo desplazamiento que nos hacía el grupo de Yanes en los últimos meses fue el detonante. Él ha orquestado con deliberada sorpresa que todo ocurrió de repente, pero no es cierto”.

- ¿Y qué puede hacer, por ejemplo, el nuevo gobierno por los vecinos de Santa Lucía, por los funcionarios o por clausurar la extracción de áridos que no haya hecho el anterior grupo de gobierno?

“No le voy a negar que el grupo anterior ha tenido sus logros, pero también sus desaciertos. Desde luego que vamos a intentarlo hacerlo mejor. Ya que me saca el tema de los áridos, sí que quería decirle que aquí hay una gran manipulación y una falta de memoria. Como se ha anunciado nosotros no vamos a reanudar la extracción de áridos. Eso es un disparate. Debo recordar que quien empezó con el cierre de las areneras fue Tita Díaz. Rafael Yanes la continuó, retomando el relevo que ya estaba iniciado. En Santa Lucía, ya pedí ayuda en la Subdelegación hace unos meses para buscar la financiación a la seguridad de los posibles y futuros derrumbes. Y con los trabajadores habrá mas diálogo y consenso en las mesas de negociación. Ellos son las herramientas de nuestro Ayuntamiento”.

-Ahorro, inversión y emprendeduría, los tres pilares de su programa. ¿Me puede explicar cómo pueden ahorrar y a la vez invertir?

“No es demasiado difícil de entender. Ahorraríamos en gastos superfluos y trataríamos de ajustar al máximo presupuestos y costes, a la vez que potenciaríamos inversión, pública y privada, y emprendeduría, con la condición de que implementen proyectos en Güímar que generen empleo y bienestar”.

-Es usted de Lomo de Mena. ¿Se acusa al anterior gobierno de gobernar solo para el casco?

“Claro, Güímar no es sólo el centro, Güímar es todo un mosaico de barrios cada uno con su personalidad y sus especiales tradiciones. A menudo, en mi anterior puesto, en la Concejalía tenía que tomar el coche e ir a conocer las realidades de cada una de estos barrios, y efectivamente, podía comprobar cómo el Ayuntamiento los tenía desplazados en pro del centro, pero no obedeciendo a un plan premeditado, sino sencillamente porque se acomodaban a trabajar con lo que más tenían a mano”.

-¿Es consciente usted de que con la que está cayendo, gobernar no es ahora mismo la mejor opción para presentarse a una reelección?

“Mucho, lo soy. Mire, yo no rentabilizo ni especulo con la política. Creo que he adquirido un compromiso con mi pueblo que no debe confundirse con hacer estrategias de ese estilo. No hacer demasiado para que pase la crisis, y ya luego sí. Ni hablar. Creo que era el momento de actuar, el pacto desgastado ya llegaba a su fin, y a los ciudadanos hay que darles ilusión y esperanza, no abandonarlos en medio de la crisis”.

-Le ha molestado que Rafael Yanes haya utilizado el nombre de Tita Díaz para afirmar que ella nunca le hubiera traicionado como según él ha hecho usted?

“Me ha molestado mucho porque Tita, lamentablemente, no está entre nosotros. Usar su nombre para afirmar traiciones es muy grave y deshonesto. Yo crecí con Tita, conocí sus inquietudes por este municipio y supe de sus aspiraciones muy de cerca. Créame, si Tita estuviera en mi lugar, lo hubiera hecho igual que yo”.