Delgado propone que se utilice el material en el asfaltado del anillo insular. / MOISÉS PÉREZ
JESSICA MORENO | Santa Cruz de Tenerife
Los grupos del PSOE y Coalición Canaria (CC) en el Cabildo de Tenerife llevan el viernes a pleno una moción para que se ordene el cierre del ciclo de caucho de neumáticos, desarrollando la ordenación del empleo del betún en las carreteras que obligue al reciclado de los neumáticos fuera de uso, siguiendo las recomendaciones de 2007 del Ministerio de Fomento y Medio Ambiente, a los efectos de utilizar el polvo de caucho en la fabricación de mezclas, para aplicar en todas las carreteras que a partir de la fecha se ejecuten en la Isla. Así lo explicó a este medio el consejero de Carreteras, José Luis Delgado, quien precisó que además de fomentar el cuidado del entorno, se mejora la seguridad en las vías.
Asimismo, el texto propone que se ordene desarrollar acuerdos entre las administraciones y las empresas de Gestión de Neumáticos, a los efectos de priorizar el reciclado de estos actualmente en el PIRS, para que sean trasladados a las plantas de Valorización, y posteriormente reutilizados en el asfalto que se empleará en el cierre del anillo insular.
PSOE y CC solicitarán, también, al Gobierno de Canarias la aplicación de esta moción en todas las obras de carreteras que esta ejecutando en Tenerife.
Número de vehículos
La Isla dispone de un parque móvil de más de 600.000 coches, lo cual supone unos 2.400.000 neumáticos aproximadamente que cada año se sustituyen, generando un problema de sostenibilidad ambiental. A ello se suma que en Tenerife actualmente existen unas 7.000 toneladas de estos neumáticos en desuso y ocupan en el vertedero del PIRS unos 300.000 metros cúbicos, lo que equivale a unos ocho campos de fútbol a una altura de siete metros.
Tras analizar esta solución se comprueba que los neumáticos tras trocearlos se pueden triturar hasta que se consigue un polvo de menos de un milímetro de espesor denominado polvo de caucho. Ese polvo, añadido al betún en el momento previo del asfaltado, “crea una carretera más silenciosa, más elástica, y más resistente a las rodaduras, y que filtra mejor el agua”. Estas vías de goma suponen un incremento de coste entre 3 y 5 euros por toneladas que las tradicionales, pero dan mejor resultado.
Actualmente hay en España más de 300 kilómetros de estas carreteras de goma y los ministerios de Fomento y Medio Ambiente han desarrollado un Manual de empleo de caucho en mezclas bituminosas.