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“Confío en recuperar mi vida”

NATALIA TORRES / JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife
Fotos: FRAN PALLERO

entrevista a saida prieto
Un momento de la entrevista a Saida. | F. P

Aún no puede ponerse tacones, lo echa de menos. Como tantas otras cosas. Su estado no le permite todavía disfrutar como lo hace cualquier joven de su edad, de la manera en que ella misma lo hacía antes. Aun así, Saida Prieto, candidata de Parque Bulevar y DIARIO DE AVISOS a Reina del Carnaval 2013, da gracias por haber vuelto a nacer, por haber superado el trance más duro de su vida. Ahora le queda un largo camino por recorrer, que afronta con la ilusión y la esperanza de disfrutar de nuevo de su Carnaval y de “volver a ser quien era”.

-La primera pregunta es obligada. ¿Cómo se siente?
“Para mí, el 6 de febrero volví a nacer. Fue muy duro intentar salir de aquel traje y de todo lo que pasó después. Pasé dos meses de mi vida ingresada, los dos peores meses de mi vida y volver aquí, cuando ya estás recuperada, con tu familia, estar en tu isla, con tu gente, eso es sin duda lo mejor. Ahora me queda un largo camino, porque la recuperación es dura y muy lenta; de hecho, aún me quedan al menos dos operaciones, pero intento llevarlo lo mejor que puedo”.

-¿Qué es lo último que recuerda de lo que pasó aquella noche?
“Lo recuerdo todo. Desde que comencé a oír los gritos y vi las llamas detrás de mi espalda, quemándome, hasta que llegué al hospital. Recuerdo a los médicos y enfermeras a mi alrededor, y a partir de ahí no me acuerdo de nada más porque me sedaron”.

-Hay algunas imágenes en las que incluso se la ve a usted salir por su propio pie de la zona donde se produjo el suceso, ¿no fue así?
“Eso dicen, pero yo lo que recuerdo es que salí en una silla de ruedas; es lo que tengo en mi cabeza. Caminando no salí. Lo que recuerdo es que sí que me levanté cuando me preguntaron cómo estaba, y después me senté en la silla de ruedas”.

-En ese momento en el que intenta salir del traje, en el que estaba atada, ¿quién fue la primera persona que la ayudó a escapar?
“Mi diseñador. Víctor fue quien me salvó la vida. Se quemó las manos y la cara, él y Carolina, los dos. Recuerdo un momento en el que él me estaba abrazando y estábamos solos los dos, porque todo el mundo se apartó; y es más, cuando me desperté, lo primero que le pregunté a mi madre fue que dónde estaban los bomberos, porque ahí no había nadie, no vi a ninguno. El único que cogió un extintor fue uno de los técnicos, al que le agradezco que al menos consiguiera apagar las llamas”.

-¿En algún momento de la preparación o el desarrollo de la Gala tuvo constancia de que el traje de la candidata que iba detrás de usted llevaba algún tipo de artefacto?
“No, no sabía nada. Creo que nadie sabía que ese traje llevaba este tipo de fuego, supuestamente ‘fuego frío’, aunque ese tipo de fuego no debía quemar, así que obviamente no lo era. Creo que nadie sabía nada. Recuerdo perfectamente cómo ella se puso justo detrás de mí cuando estaba saliendo una de las candidatas de Santi (Castro); luego iba yo, me quedaba nada para salir y fue cuando oí unos gritos diciendo ‘¡no, no!’. Fue cuando me volví y me di cuenta de me estaba quemando. Fue algo horrible”.

-¿Cree que se tenía que haber suspendido la Gala?
“Sí. No era necesario salir diciendo que una candidata se había quemado, no hacía falta, pero creo que se tenía que haber suspendido, porque todo siguió como si no pasara nada; salieron las candidatas, se proclamó la Reina (Soraya), por quien muestro todo mi respeto y a la que felicito. Pero no me pareció un buen un gesto que todo siguiese; fue chocante que continuara”.

-Por lo que relata, da la sensación de que las medidas de seguridad no eran las más adecuadas, sobre todo teniendo en cuenta el recinto, la afluencia de público…
“Yo al menos no vi a ningún bombero. Te puedo asegurar que si hubiera habido alguno, no me habría quemado tanto como me quemé. Eso creo que está clarísimo. La gente se apartó, no sabía qué hacer, se quedó parada; los únicos que luchamos contra ese fuego fuimos mi diseñador y yo. Por un momento pensé que me moría. No podía respirar, no tenía fuerzas para tirar del cinturón intentando soltarme, me quedé sin fuerzas…”.

-Parece que si no pasan cosas como esta no se mejoran los protocolos de actuación…
“Cada día me pregunto por qué, por qué a mí. Mi madre me insiste en que no busque respuestas, porque no las hay. Solo me queda luchar y salir adelante. Pero espero que no vuelva a pasar algo así nunca más, porque si no el año que viene me quemo por segunda vez (sonríe)”.

-¿Le ha molestado el silencio del otro diseñador y que ni él ni la candidata cuyo traje le quemó se hayan interesado por su estado?
“Más que molestia, me duele que vayan diciendo por ahí que lo han pasado mal, cuando ni siquiera se han dirigido a mí para saber cómo estoy. Pero ellos sabrán. Yo estoy bien, y será la justicia la que determine las culpas de cada cual”.

-¿Estaría dispuesta a hablar con ellos en estos momentos?
“Por supuesto, no pasa nada”.

-¿Y qué le dirías a Willy Jorge si lo tuvieras delante?
“Uf. Creo que no le diría nada. Sería duro tener delante a la persona que fue la culpable, porque para mí lo es, porque era su traje y fue quien puso ese artefacto… Realmente, no sé lo que le diría”.

-Y después de todo lo que pasó, lo siguiente fue despertar en el Virgen del Rocío de Sevilla. En ese momento, ¿cómo se sintió? ¿Qué fue lo primero que pensó?
“Después de preguntarle a mi madre dónde estaban los bomberos y que por qué se había apartado la gente, lo siguiente fue decirle a mi padre que me lo iban a pagar; estaba indignada, con un sentimiento de rabia terrible. Fue muy duro despertarme en esa habitación y darme cuenta de que en solo unas horas mi vida había dado un giro de 360 grados”.

-¿Es a eso a lo que se refirió su madre el otro día cuando comentó que la Saida de ahora no tiene nada que ver con la que era?
“Sí. Antes era dicharachera, me gustaba ir a todos lados, me gustaban las fiestas. Ahora no, aunque tampoco mis circunstancias me lo permiten. Espero volver a ser la misma, recuperar mi vida”.

-¿Está preparada para lo que se avecina y, sobre todo, para las críticas que puedan surgir durante el proceso judicial?
“Para esa parte tengo a mi abogado, y será él quien responda”.

-Su caso ha trascendido fuera de la Isla, porque mucha gente se ha interesado por usted. ¿Cómo afronta esa notoriedad?
“Creo que estoy preparada, y con mi abogado que me asesora podremos hacer frente a lo que venga. Es lo que toca”.

-A pesar de lo duro que está siendo, su lucha también es un ejemplo. Usted misma lo vivió al salir del hospital de Sevilla, cuando mucha gente se echó a llorar, porque no todos salen adelante…
“La verdad es que no pensé recuperarme tan pronto. Me decían que me esperaban muchos meses en la Unidad de Quemados; pero un día me desperté y me dije ‘yo de aquí me quiero ir sí o sí’. Puse ganas y muchas fuerzas, y aquí estoy. Un día caminé un poquito, al otro día otro fisquito, y así hasta que me dijeron que me iba. Ese día fue inolvidable”.

-¿Qué mensaje daría a toda esa gente que la ve como un ejemplo?
“Que luchen, que luchando se sale adelante. Ahora que me ha pasado esto, valoro mucho más las cosas de lo que lo hacía antes. Y luchar es lo que me da fuerzas, es lo que me queda”.

entrevista a saida prieto
«Está claro que si hubiera sido fuego frío no me habría quemado como me quemé”, afirma Saida

[sws_grey_box box_size=»620″]“Si puedo, me volveré a subir al escenario con un traje”

El día a día en la vida de Saida Prieto pasa por unas dolorosas rutinas, que hacen que se encuentre siempre muy cansada y dolorida. “Me levanto, voy a rehabilitación, vuelvo a casa, descanso un poco. Estoy con medicación y no puedo estar mucho tiempo de pie, ni tampoco sentada. El médico me ha dicho que es un largo camino, que aún queda mucho, pero que trate de hacer mi vida normal, que le limpie los cristales a mi madre en casa, que friegue, que barra, que haga de todo. Es duro porque me cuesta mucho hacerlo, pero tengo que intentarlo, porque gracias a Dios no estoy incapacitada”, recalca la joven tinerfeña.

Por delante, Saida tiene al menos dos intervenciones quirúrgicas más, a las que se someterá en el Hospital de la Candelaria. A partir de ahí, está dispuesta a todo. “Si me dicen que me suba el año que viene a un escenario con un traje, lo hago. Lo tengo muy claro”, señala la candidata a Reina del Carnaval 2013, que afirma: “Para el futuro espero poder desarrollarme en lo que me gusta, la radio o la televisión; si me sale la posibilidad de seguir como modelo también, aunque todo dependerá de cómo quede y de cómo me recupere”. Y es que, aunque su coraje la empuja a mirar hacia delante, el proceso será muy complejo. “Un día te sientes con ganas de luchar, de salir adelante, por mi hija, por mis padres, por mi familia, por la gente que me ha apoyado; pero hay otros días en los que te levantas y dices ‘no puedo más, qué dolor’; no me dan ganas de hacer nada. De hecho, apenas salgo, aunque mis amigas y yo misma me obligan, porque sé que me viene bien y me despeja”.

Sus padres (Juan Manuel y Dulce), su pareja y su hija son sus principales apoyos ahora, pero también miles de personas se han volcado con Saida Prieto. Ella agradece la atención, y en especial el cariño que le dispensaron desde la Asociación Amigos de Vitolo y el futbolista Pedro Rodríguez.[/sws_grey_box]