X
candelaria>

El paseador de perros

   

paseador de perros

El dog walking de Candelaria pasea a diario más de una docena de perros por las ramblas de los Menceyes y la avenida Marítima. | NORCHI

NORBERTO CHIJEB | Candelaria

Solo en Santa Cruz de Tenerife están censados cuarenta mil perros. Pero es que en Candelaria la cifra alcanza los 6.000, o lo que es lo mismo, un perro por cada cuatro habitantes.

Ustedes se pueden imaginar, por tanto, que el nuevo oficio de paseador de perros no es ninguna broma. Muchas personas, por edad o por ocupación profesional, no tienen tiempo material para sacar a sus mascotas a pasear, sobre todo aquellos que los tienen en pisos. Muchos acudan entonces al paseador profesional.

Los fines de semana y las horas nocturnas tienen apenas demanda y muchos son los que utilizan el parque de perros que el Ayuntamiento de Candelaria inauguró hace unos meses en la parte alta de Punta Larga.

Este nuevo nicho de negocios comenzó en los años ochenta en Estados Unidos y en México y no hace mucho que ha emigrado a Europa. Aquí, que se sepa, ya hay unas cuantas empresas o autónomos que se dedican a ello, como un argentino que por lo pronto, a la espera de ampliar su negocio, nos dijo, no quiere darse a conocer de manera oficial.

Nuestro protagonista, todos los días, desde las ocho de la mañana, saca a pasear por la rambla de Los Menceyes y la avenida marítima de la Villa Mariana a más de una docena de canes. El paseo dura en torno a las dos horas y sus emolumentos varían dependiendo de que sea un día, una semana o un mes. La tarifa mínima es 8 euros por día y animal, aunque el abono semanal o mensual rebaja considerablemente el precio. El dog walking recoge a las mascotas en sus viviendas y cada uno de ellos va amarrado con una correa no extensible a un arnés que lleva el paseador en su cintura. Todos caminan al lado o detrás de él. Además, en el caso de Candelaria, este paseador argentino también ha ampliado su oferta para aquellas personas que necesitan ayuda a domicilio, haciendo recados burocráticos -bancos, administraciones y demás- o una simple compra que necesite el cliente. Incluso dispone de un terreno donde puede cuidar del perro durante largas estancias hasta que sus dueños lo reclamen.

“El paseo es una actividad fundamental para la mascota, es una necesidad básica que le aporta salud física y psicológica. Está demostrado que los perros que realizan varios paseos de una hora de duración se muestran más sanos y más receptivos”, sentencia la leyenda que vende este servicio innovador en Candelaria y que más pronto que tarde comenzará a extenderse por Canarias.