Francisca Luengo acusa al PP de “bloqueo inadmisible en materia de empleo” y asegura que “Milagros no se pueden hacer”

EFE | Las Palmas

La consejera de Empleo del Gobierno de Canarias, Francisca Luengo (PSOE), ha acusado hoy al Partido Popular de someter a un “bloqueo inadmisible” en materia de política de empleo al archipiélago al no transferirle 76 millones de euros que el Estado había comprometido para financiarlas.

Esa demora en la concesión del dinero ha situado “en una situación francamente difícil a la Consejería de Empleo y al Servicio Canario de Empleo”, ha declarado Luengo, que ha expresado incluso sus dudas sobre si el Gobierno central cumplirá finalmente su compromiso de destinar esa cantidad a la comunidad autónoma.

El compromiso, ha afirmado la consejera, “se produjo en abril, pero ahora, en septiembre, se dice ‘donde digo digo, digo Diego’”, debido a que el Ejecutivo español ha decidido recortar más de lo previsto los fondos a destinar a las islas y a otras autonomías.

Hasta el punto de que esos 76 millones “no sabemos si vendrán ni cuándo”, ha recalcado Luengo, que ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa convocada para analizar el diagnóstico que el Consejo Económico y Social de Canarias (CES) ha hecho de la situación de Canarias en su informe anual de 2012.

Acompañada por Fernando Redondo, presidente del CES, Luengo ha opinado que esa incertidumbre sobre si Canarias recibirá finalmente el dinero que esperaba para invertir en acciones de promoción del acceso de la población al empleo se enmarca en la que ha tachado de “política de recortes del PP”, que ha cuestionado con el argumento de que no permiten afrontar el paro al no dinamizar la economía.

“Las medidas que se han propuesto en todo el mercado laboral a veces no funcionan sin políticas de estímulo económico“, por lo cual, “si la política económica es la que estamos sufriendo, de pura austeridad, pues, desde luego, nos vamos a morir por falta de alimento”, ha sentenciado la consejera.

Y ha añadido que su planteamiento está justificado por el hecho de que “la crisis genera paro, pero el paro genera pobreza y la pobreza hace que no haya consumo, y el no consumir ahonda la crisis y hace que no salgamos de ese círculo vicioso”.

Desde ese razonamiento, Francisca Luengo ha defendido las medidas que su Gobierno está aplicando en materia de lucha contra el paro y ha sostenido que, si estas nos dan mejores resultados y no impiden, por ejemplo, que aumente el desempleo juvenil, es “porque Canarias, sola y sin recursos, no lo puede hacer”. Y ha apostillado: “Milagros no se pueden hacer“.

La consejera canaria ha precisado, en todo caso, que espera conseguir que finalmente sí se concedan al archipiélago los citados 76 millones de euros para políticas de empleo.

Para ello, ha dicho que tiene previsto dirigirse hoy mismo a la secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, con la que ha subrayado que había intentado contactar días antes pero sin lograrlo porque estaba de vacaciones, a fin de reclamarle ese dinero.

No obstante, ha admitido que conseguir esos fondos no impedirá que la tasa de desempleo juvenil se mantenga en el archipiélago en su nivel actual, que ha cifrado en el 70 %, si bien ha asegurado que contribuirá a que ese segmento de la población consiga trabajo cuando se remonte la crisis porque posibilitará que mejore su formación profesional.

Puesto que, en el caso de la mayoría de la población activa joven que está parada en las islas, “sus oportunidades de empleabilidad son mínimas”, debido a que carecen de preparación, con solo un 7 % del total que posee un título universitario y una mayoría que, “como mucho, tiene estudios secundarios”, ha expuesto.

Su planteamiento ha sido coincidente, en gran medida, con el de Fernando Redondo, que, al hablar del informe del CES del año pasado, ha dicho que confirma que “el gran problema de Canarias, trágico, imparable”, es el desempleo.

Un problema cuya solución ha considerado difícil, en parte porque aún no se ha emprendido la diversificación económica tantas veces prometida pero también porque en el archipiélago se da un tipo de “mal parado, desde el punto de vista de las soluciones”, pues la mayoría de los desempleados son jóvenes de 16 a 25 años sin formación o mayores de 45 sin preparación para cambiar de oficio.