EUROPA PRESS | Las Palmas
El Área Joven de Izquierda Unida Canaria (IUC) señala que la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) realiza contratos irregulares a sus alumnos, donde incluye “cláusulas ilegales” referentes al derecho de imagen.
IUC ha puesto el ejemplo de la Campus Party Europe, uno de los eventos informáticos más importantes que se celebrará en Londres durante septiembre, donde los alumnos de la ULPG deben de firmar un documento donde se les pide que renuncien “literalmente” a sus derechos de imagen, tal y como ha explicado la organización en un comunicado.
“El contrato pide, literalmente, ‘el derecho y permiso ilimitado e irrevocable para captar, registrar, usar, reutilizar, publicar, republicar y distribuir retratos fotográficos, vídeos o imágenes de mí o en las que yo esté incluido o incluida, a través de cualquier medio, sin límite en el tiempo, para ilustración, promoción, arte, editorial, publicidad, comercio o cualquier otro propósito’ y concede a la ULPGC la posibilidad de ceder este derecho a terceros”, explica la nota.
Así, con todas estas características, para los jóvenes de esta formación estamos ante un contrato “completamente abusivo y con ello, ilegal” y que el mismo, de firmarse, se podría anular a través de juicio.
Por ello, desde la formación animan a los alumnos a que no firmen el mismo alegando que los derechos de imagen “no se pueden conceder de manera irrevocable” y que no permite tener intimidad de lo realizado en dichos eventos.
“La ULPGC o terceras partes podrían usar la imagen del alumno, tanto si proviniere del evento como de en otro lugar y momento. Por si fuera poco, se pide a los alumnos que renuncien a reclamar incluso en el caso de difamación, calumnias o invasión de la privacidad”, insisten desde la formación.
El comunicado expresa que esta no es la primera denuncia respecto a la organización del Campus Party ya que para la selección de participantes se abrió un número limitado de plazas en época de exámenes, y sin ningún tipo de aviso previo, que se agotó en cuestión de minutos, “ya que se hizo por orden de llegada, independientemente de méritos académicos, estudios o conocimientos de lengua inglesa. Tras las protestas de los alumnos, se abrieron veinticinco plazas adicionales pero con idéntico sistema de selección”.