Las Claves de Inferno

POR JUANCA ROMERO HASMEN

Mónica González Álvarez

Recuerdo aquellas noches de fin de semana -han caído un puñado de años desde entonces- en las que al encender la radio en busca de programas que atrajeran mi atención, descubrí la voz de una muy joven periodista que apuntaba maneras. Y es que Mónica G. Álvarez siempre ha puesto ante el micrófono, la misma profesionalidad y talento que también deposita entre las páginas de sus libros. Ahora, esta incansable periodista y escritora, se enfrenta a su nuevo reto literario. Las Claves de Inferno de Dan Brown, un libro en el que pone luces y taquígrafos para poder entender todas las respuestas a las preguntas que la obra del afamado escritor norteamericano. Con esta vallisoletana de la que presumo ser además de compañero de faenas, también su amigo, he tenido una interesante conversación para este diario.

-Las Claves de Inferno es tu último libro publicado. ¿Supone un paso adelante en tu evolución como autora?

“Absolutamente. Que Libros Cúpula (Planeta), de la mano de su directora Laura Falcó, creyeran en mí para este proyecto y los que vendrán, supone alcanzar un peldaño más dentro de mi aún corta carrera literaria. Que por cierto, espero que sea muy larga porque me encanta contar historias y que el lector aprenda de ellas. Pero como digo, aún me queda un largo camino por recorrer… (sonríe)”.

-¿Se convierte en una enorme responsabilidad enfrentarse al trabajo de descifrar la obra de un autor como Dan Brown?

“Ha sido todo un reto, divertido, a veces frustrante, otras enigmático, pero siempre apasionante. Analizar y descifrar los códigos ocultos que el novelista siempre deja en el aire me ha permitido agudizar mi ingenio para toparme con historias francamente interesantes”.

-¿En la novela Inferno de Dan Brown el autor se devanea en exceso con la ficción, o podemos encontrar luces de la realidad histórica?

“Una novela es eso, una historia inventada por el autor que puede o no tener tintes verídicos. Brown juega con eso mezclando una ficción aparentemente exagerada con una realidad pasmosa que cuando la conocemos, nos sorprende. Uno de los hechos reales que cuenta en su novela es la existencia del llamado Movimiento Transhumanista, una comunidad real de científicos cuyo objetivo principal es crear una raza de superhombres, al igual que en su momento lo intentó Adolf Hitler durante el Nazismo. Por otra parte, el principal protagonista sería Dante Alighieri tras cuya sombra planea el ocultismo y una vida, si cabe, triste y apesadumbrada”.

-¿Encontraremos en Las Claves de Inferno las respuestas a las muchas preguntas que Dan Brow ha dejado sin responder en su libro?

“Así es. Enigmas vinculados al Averno en ciudades como Florencia, Venecia o Estambul, debates científicos sobre el problema del crecimiento demográfico, la peligrosidad de la ya mencionada organización científica Movimiento Transhumanista. También analizo cada uno de los símbolos y números que componen la obra de Brown y la comparo con la Commedia de Dante. Porque tras una ardua investigación, me atrevo a afirmar que cada uno de los personajes a los que el autor norteamericano da vida son reencarnaciones de la Divina Comedia trasladadas al siglo XXI. Yo les denomino los hijos de Dante. Ahora el lector descubrirá en Las Claves de Inferno quién es Virgilio, Beatriz, Lucifer o la pantera, entre otros”.

-¿Se puede entender todo lo que envuelve a la figura de Dante y no acabar loco?

“Nunca se sabe todo de un personaje histórico y menos aún si ha vivido hace más de 800 años. Siempre quedan ranuras ocultas que van emergiendo a medida que uno va buscando información. No obstante, la figura de este gran literato me ha parecido tan fascinante que se deberían de publicar más libros contando su biografía. La oculta, por supuesto. Porque en realidad, no se conoce que: fue líder de sociedades secretas de la época como la Fede Santa y los Fedeli d’Amore, tampoco que la Divina Comedia es en realidad un libro dedicado a dichas organizaciones para comunicarse entre sus miembros y criticar al poder eclesiástico… Por suerte, no me he vuelto loca de atar tras leer a Dante (risas) Sino más bien una apasionada por él y su obra”.

-¿Qué se esconde tras los códigos secretos del poeta italiano Dante?

Toda una estratagema para enviar mensajes a sus camaradas de las sociedades secretas. Cada número tiene un significado especial. El 9 que supuestamente encarnaría la figura de su amor platónico Beatriz, la Santísima Trinidad y los 9 círculos del infierno, en verdad se trataría de la Orden del Temple. Y la Fede Santa, clara descendiente de los templarios, subyace gracias a San Bernardo de Claravalque emerge en la tercera parte de la Divina Comedia -el Paraíso- para llevar a Dante ante Dios. Términos como pietra (piedra) se referían a la corrupta iglesia católica del siglo XIII, amore a un miembro de la sociedad y morte (muerte) al éxtasis que experimentaban sus fieles en cada una de sus sesiones. El amor al que Dante tanto se refería en su Divina Comedia no era totalmente por Beatriz (aunque sí la dedicó dicha obra), sino que con esta metáfora plasmó esos códigos, secretos como decíamos, de una asociación que intentaba sobrevivir a la censura y la Inquisición”.

-El Cielo y el Infierno, el bien y el mal… ¿Cómo autora, cuál de estas dos mitades encuentras más enriquecedoras a la hora de escribir?

“Todo lo que remueva conciencias, estados de ánimo y por supuesto ideologías, es enriquecedor. Sin embargo, parece que el ser humano tiende más a preocuparse por no ir al infierno que por viajar hasta el cielo después de cruzar el umbral de la muerte. No saber si nos encontraremos con fuego, penurias o castigos psicológicos en esas tierras infernales, da para multitud de ensayos diferentes”.

-¿Por qué es tan importante el Mappa dell’Inferno de Botticelli?

“Porque es la mejor expresión artística y visual de los nueve círculos del Infierno de Dante que se ha hecho en la historia. Este genio de la pintura logró plasmar los nueve niveles en los que se dividía el Averno, pero también la infinidad de castigos que se perpetraban en su interior. Y por supuesto, poner cara al malvado Lucifer de tres cabezas, entre otros enigmas que el lector encontrará en Las Claves de Inferno de Dan Brown y que si me lo permites no voy a desvelar. (sonríe guiñando un ojo)”.

-En tu libro prestas especial atención al Movimiento Transhumanista, ¿Es este círculo científico-elitista el portador de las claves para entender Inferno?

“Es una de ellas, ya que nos lleva a una conclusión muy interesante: ¿el hombre está jugando a ser dios gracias a la ciencia? Llevamos años, y últimamente parece que aún más (no hay más que mirar lo que se ha publicado en el último mes en los medios de comunicación: hamburguesas hechas de células madre, dientes fabricados con orina, microcerebros en tubos de ensayo…), donde la ciencia ha ido progresando de tal manera que la manipulación genética está siendo la única manera de conseguir una buena salud. Bien, esta organización peligrosa si cae en manos inadecuadas, puede provocar el caos. ¿Te imaginas que determinados gobiernos conspiren para crear virus letales? ¿O que una mayor innovación tecnológica acabe con la raza humana? Aunque nos parezca sorprendente, es posible, y vamos camino de ello. No lo digo yo, son palabras de los transhumanistas”.

-¿En manos de qué o quienes estamos los ciudadanos del mundo?

“De líderes políticos, grandes empresarios y personajes influyentes en nuestra sociedad. No son muchos.Los más catastrofistas aseguran que los que mueven los hilos son menos de 25 personas en todo el mundo. Y yo creo que no van desencaminados. Estos grupos elitistas lo controlan todo: dónde vivimos, qué hacemos en cada momento, con quién estamos, qué comemos, qué leemos o vemos por televisión. No hay que olvidar que los grandes grupos de comunicación eligen, diariamente, qué hechos van a ser noticias y cuáles no. Vivimos en una realidad subjetiva donde al final y como Brown plasma en su Inferno, nada es lo que parece”.

-Gracias por haber dedicado parte de tu tiempo a los lectores de ANGULO 13 en DIARIO DE AVISOS.

“Gracias a ti y a todos los lectores por permitirme charlar un ratito sobre estas Claves de Inferno de Dan Brown, que espero y deseo que sean igual de apasionantes y enriquecedoras que lo han sido para mí. Hasta pronto, amigos”.