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Dos detenidos por agredir al conductor cuya máquina arrolló a una mujer en el vertedero de Jaén

EUROPA PRESS | Jaén

La Guardia Civil de Jaén ha detenido a dos personas como presuntas autoras de la agresión que ha sufrido el conductor de una máquina que ha arrollado este miércoles a una mujer, causándole la muerte, cuando buscaba algo entre la basura de un vertedero ubicado en la capital.

Fuentes del Instituto Armado consultadas por Europa Press han confirmado que los arrestos se produjeron en el mismo lugar donde se produjo el suceso y, de hecho, cuando los agentes llegaron encontraron a los hombres propinándole golpes al herido.

Después, han arrestado a una tercera persona que, junto a otros familiares o allegados de la víctima, se había desplazado hasta el vertedero tras conocer lo sucedido, aunque en este caso por alteración del orden público, según han indicado desde la Guardia Civil, que está investigando las circunstancias en la que ha tenido lugar tanto el fallecimiento como la posterior agresión.

El conductor de la máquina que arrolló a la mujer, tipo pala-compactadora, se encuentra en el Hospital Neurotraumatológico. Está siendo tratando y evaluado de las numerosas heridas y golpes que presenta y presenta pronóstico reservado, según han añadido fuentes sanitarias.

Sobre este suceso se ha pronunciado también el subdelegado del Gobierno, Juan Lillo, quien ha lamentado el fallecimiento de la mujer, un «hecho lamentable» por el que ha expresado su «pesar». No obstante, ha agregado que «la cosa no quedó ahí» en alusión a lo que ha calificado como «agresión masiva por acompañantes».

«El conductor está en estado grave hospitalizado. No ha sido un empujón ni un guantazo, ha sido algo más grave», ha manifestado Lillo, quien ha destacado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han intervenido y hay dos detenidos por la agresión que «se pondrán a disposición del juzgado tan pronto como se hagan las diligencias».

El subdelegado ha apuntado, además, que tanto la mujer como quienes iban con ella «se habían introducido en la planta» de tratamiento de residuos sólidos urbanos, algo que «parece ser que es habitual, a pesar de que hay una vigilancia particular dentro de la zona».