El informe demuestra que se ha progresado en educación, aunque menos de lo esperado. / J.G.
SARAY ENCINOSO | Santa Cruz de Tenerife
Los jóvenes españoles ya estaban lejos del nivel educativo medio en los países desarrollados, pero los adultos tampoco pueden presumir de estar mejor. Son los penúltimos en comprensión lectora y los últimos en matemáticas. Lo dice un estudio de la OCDE que se hizo público ayer y que se conoce como PISA para adultos. El Programa Internacional para la Evaluación de la Competencia de los Adultos (PIAAC), en su primera edición, reveló que en otros lugares del mundo, como Japón, Holanda o Suecia, los titulados en Bachillerato saben más que los universitarios de aquí.
En términos cuantitativos, España obtuvo 252 puntos de media (sobre una base de 500) en comprensión lectora (solo supera a Italia), 19 menos que la media OCDE y 246 en matemáticas (23 menos), en una prueba que hicieron 166.000 personas de 16 a 65 años en 23 países (algo más de 6.000 españoles) entre agosto de 2011 y marzo de 2012. Además, tiene a más gente que la media en los dos niveles más bajos (27,5% frente a 15% en lectura, y 30% frente a 19% en matemáticas) y muy poca en los superiores (4,7% frente a 11% y 4,1% frente a 13%, respectivamente); no hay prácticamente nadie en el nivel más alto, el 5.
Un profesor de la ULL sostiene que el nivel educativo del país no deja de crecer
Sin embargo, uno de los investigadores que ha participado en el estudio, José Saturnino Martínez, profesor de Sociología de la Universidad de La Laguna, analiza los datos del informe PIAAC de forma positiva. “España no ha parado de mejorar: el nivel educativo es mejor que hace años”. Su experiencia le ha demostrado que no se pueden comparar países que han recorrido una historia diferente. Tampoco se debe valorar, dentro de un mismo país, el impacto de leyes educativas -como se está haciendo con la de 1970 y la Logse en España- si no se tienen en cuenta las características de cada época. “No hay que olvidar que en Canarias a principios de los años 80 aún había población infantil sin escolarizar”.
Para este experto, lo fundamental del informe no es la posición de España, algo relativamente predecible, sino el progreso. “Hay que acabar con la idea de que la educación en nuestro país ha ido a peor, porque los datos muestran precisamente lo contrario. Es verdad que en los últimos años la progresión no es tan rápida. pero seguimos mejorando. No es cierto que la Logse echara a perder el sistema educativo. Pero sí que introdujo un elemento importante: extendió la educación obligatoria dos años. Esto ha contribuido en parte a aumentar el abandono escolar, especialmente en unos años en los que acceder a un puesto de trabajo era sencillo”.
El diseño metodológico del informe no permite desglosar los datos por comunidades autónomas, pero todo hace pensar que si se segregaran los datos, Canarias saldría mal parada, como ya ocurre en el PISA para niños.
Lo que sí permite el estudio es confirmar una hipótesis de la que siempre se habla: la formación siempre es fundamental a la hora de tener una mejor calidad de vida y un nivel adquisitivo mayor. Una vez superada la Educación Secundaria Obligatoria las posibilidades son mucho mayores que si no se culmina esta etapa. “Ahí está la verdadera brecha, no en si se estudia en la universidad o no”, precisa Martínez. “Las personas en los grupos con peores resultados encuentran peores trabajos, menos estabilidad laboral y peores sueldos. Además, está claro que si tienes unos conocimientos y no los utilizas los acabas perdiendo”
La mejora, en todo caso, no ha sido suficiente como para sacar del furgón de cola a España.
Titulados en FP japoneses, logran mejor resultado que universitarios españoles
EUROPA PRESS | Madrid
El informe refleja que existe relación positiva entre el nivel de estudios y los resultados en PIAAC. Sin embargo, hay diferencias entre países, pues en comprensión lectora los adultos japoneses titulados en Formación Profesional de grado medio o Bachillerato obtienen mejor puntuación (289 puntos) que los titulados universitarios o de FP superior españoles (287 puntos).
En matemáticas ocurre lo mismo: los titulados en FP de grado medio o Bachillerato de Países Bajos (284 puntos), Japón (282) o Suecia (280), entre otros, alcanzan un rendimiento superior que el de los licenciados o con estudios superiores de España (278 puntos).
Los autores de este estudio indican que los países con un alto nivel de rendimiento en PISA -la prueba que se hace a los 15 años- también tienden a obtener buenos resultados en PIAAC, sobre todo cuando se trata de los individuos de edades de entre los 18 y los 27 años. Asimismo, aseguran que gran parte de la diferencia en lectura o matemáticas se atribuye, principalmente, a la formación recibida en Primaria y Secundaria.
Gomendio ha destacado que el efecto del origen socioeconómico de la familia sobre el nivel de conocimientos de los españoles es similar al de la mayoría de los países de la OCDE y de la UE, pero “siempre con puntuaciones inferiores”. En este sentido, advierte de que si en España el nivel socioeconómico de la familia es bajo, medio o alto, el rendimiento de ese adulto se va incrementando, pero siempre con una puntuación inferior a la que obtienen adultos de entornos socioeconómicos parecidos de la OCDE o la UE.
En cuanto a los efectos de género, en las cohortes de mayor edad, los hombres tienen resultados ligeramente superiores a las mujeres, una diferencia que casi no se aprecia entre los jóvenes y esto se debe a que en los años sesenta y setenta había una proporción mayor de hombres escolarizados.
La “gran mejora” según la secretaria de Estado del nivel de los españoles en lectura y matemáticas se da entre 55 y 65 años y de 45 y 54 años, pero se estanca en las siguientes generaciones, a diferencia del resto de países en los que sí se avanza desde edades inferiores. “El avance en la adquisición de competencias se produce en las generaciones más antiguas que entran en este estudio”, ha aseverado.
EDUCACIÓN ATRIBUYE EL “ESTANCAMIENTO” A LA LOGSE
Para explicar esta diferencia, Gomendio ha hecho alusión a los cambios que ha habido en el sistema educativo español. Así, ha señalado que la población que estudió entre los sesenta y setenta presenta una mejora de 22 puntos, que continúa entre la generación que estudia entre los setenta y ochenta y los ochenta y noventa, con un incremento de 11 puntos, como consecuencia de la obligación de la escolarización obligatoria hasta los 14 años.
Sin embargo, ha advertido del “estancamiento” en el nivel de conocimientos de lectura y matemáticas de los adultos que estudiaron en los años noventa bajo el sistema de la Ley Orgánica General del Sistema Educativo (LOGSE), aprobada por gobierno del PSOE en 1990.
El informe de la OCDE refleja la existencia de diferencias en cuanto al nivel de competencias entre los inmigrantes y los nativos, una distancia que en España es menor, puesto que la mayoría de las personas que vienen de fuera comparten la lengua.