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Los niños del Villa Ascensión se quedan de nuevo sin clase

T. F. | Santa Cruz de Tenerife

El equipo docente del Colegio de Educación Infantil y Primaria Villa Ascensión (Santa Cruz de Tenerife) demostraron ayer de nuevo su férrea determinación a impedir que dos de sus alumnos puedan retornar a sus clases a pesar de que tanto la Consejería de Educación como el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Santa Cruz de Tenerife han decidido que están obligados a guardar los medicamentos que dichos pequeños requieren en caso de emergencia.

Por tercera vez, los dos niños volvieron a ver cómo la puerta de su colegio se cerraba frente a sus rostros en la mañana de ayer, a pesar incluso de la medida cautelar dictada por dicho órgano jurisdiccional.

En esta ocasión, los responsables de dicho centro argumentaron a los padres que tanto la disposición de la Consejería como la del juzgado (que se remite al cumplimiento de la primera) sólo les obliga a custodiar los fármacos en hora docente, y lo que le pudiera pasar a los niños en el comedor no era de su responsabilidad.

Cabe recordar que estos docentes se niegan a aplicar una medicina, concretamente un bolígrafo de adrenalina, que no requiere de conocimientos sanitarios y que consiste en quitar una tapa de dicho bolígrafo, aplicarlo sobre el niño (incluso con tela vaquera mediante) y quitarlo tras contar hasta diez.

Los pequeños, de 7 y 5 años, son alérgicos a determinados alimentos, como los frutos secos u frutas como el kiwi, etc.