Polémica en Valencia por autorizar a un jeque árabe aparcar en la plaza del Ayuntamiento

El exclusivo Ford Black Spider del jeque áraba en la Plaza del Ayuntamiento de Valencia. | E.P.

EUROPA PRESS | Valencia

El concejal del área de Seguridad Ciudadana de Valencia, Miguel Domínguez, asegura que el consistorio no pudo denunciar el coche de un jeque árabe -un Ford Black Spider- que estuvo aparcado el 4 de septiembre en la Plaza del Ayuntamiento, “por tener una matrícula no comunitaria (Emiratos Árabes) y explica que no se pudo retirar por la grúa dadas las dimensiones del vehículo.

Así consta en una respuesta escrita a las preguntas formuladas al pleno por el concejal de Compromís, Joan Ribó, quien interpeló por si el coche estaba autorizado a entrar y a aparcar en la Plaza; el motivo de la autorización en caso afirmativo; por los criterios “objetivos” para autorizar ese uso; por si con ello se ha preservado el carácter “emblemático” de este lugar y en base a qué criterios no se sancionó al conductor ni se retiró el vehículo “como pasaría con el de cualquier ciudadano”.

Ribó explicaba en el escrito que el vehículo estuvo aparcado “durante muchas horas” de la mañana en medio de la plaza, una zona de peatones y recuerda que en abril de 2006 la Junta de Gobierno Local adoptó un acuerdo sobre ocupaciones en esta zona y subraya que el pasado año se le denegó a la coalición realizar una actividad de movilidad sostenible porque el uso estaba limitado a “actos institucionales o fiestas populares muy puntuales”.

En la respuesta se recoge que el 3 de septiembre se requirió la presencia de la Policía local en un hotel de Valencia por la existencia de un vehículo de grandes dimensiones. Un jefe del cuerpo se entrevistó con la jefa de gabinete de Relaciones Institucionales del jeque, que señaló que al día siguiente tenían que aparcar el vehículo en la Plaza del Ayuntamiento “como han llevado a cabo en otras ciudades como París, Londres o Moscú, con el único fin de mostrar un vehículo exclusivo y como deferencia hacia las ciudades anfitrionas”.

No se podía arrastrar

Según añade, ante las medidas del vehículo se facilitó el acceso al interior de la Plaza del Ayuntamiento donde estuvo estacionado unas horas hasta que se comprobó que el coche no tenía autorización “por lo que se retiró a lo largo de la mañana por su conductor”. El edil argumenta que no se pudo denunciar el coche por tener una matrícula no comunitaria (Emiratos Árabes) “requisito imprescindible para la tramitación del expediente sancionador, ni tampoco retirar con la grúa por las dimensiones y características técnicas del mismo, que impedían su arrastre”.

Para Joan Ribó, “es una falta de educación y una inmoralidad que en un periodo de crisis y de dificultades personales como el actual, el Ayuntamiento facilite el aparcamiento de este coche con el único fin de mostrar la capacidad económica del jeque”.

En esta línea, ha afirmado no entender “la justificación del concejal, que denegó en septiembre de 2012 la utilización de la plaza por parte de Compromís para realizar una actividad de movilidad sostenible”. “La Policía Local tendría que haber multado al jeque, como hace con el resto de ciudadanos y creemos que no es excusa ni la procedencia, ni las dimensiones del vehículo, puesto que se tendría que haber utilizado un cepo hasta el abono de la sanción correspondiente”, ha considerado.