Brufau: “¿Es que en Canarias sobra el trabajo para negarse al petróleo?”
Antonio Brufau, presidente de Repsol, niega que haya connivencia del ministro Soria con su empresa. / DA
DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife
El presidente de Repsol, Antonio Brufau, anunció ayer que el mayo de 2014 se hará el primer sondeo a unos 50 kilómetros de Lanzarote, y tachó el debate suscitado sobre este proyecto de “inaudito” .“Es un caso único en el mundo que se vaya a Bruselas a pedir que no se hagan exploraciones”, afirmó durante una rueda de prensa en Las Palmas de Gran Canaria, el día en que el jefe del Ejecutivo canario, Paulino Rivero, se entrevistaba con un alto cargo de la Comisión Europea con esa intención.
“Me da mucha pena este debate, porque parecemos un país que no es de última generación. Además, ¿están tan sobrados de trabajo en Lanzarote y Fuerteventura?”, se preguntó Brufau, quien dijo no entender que “las instituciones canarias asusten a los turistas” y por ello “el mundo nos mira atónitos” ante la negativa al crudo, cuando, a su juicio, esta industria convive con el turismo en Malibú, Río de Janeiro, Costa Adriática o Tarragona.
Sobre el impacto ambiental, el presidente de Repsol insistió en que “no hay ningún riesgo de derrame” en los sondeos, aunque admitió que “por cada 50.000 se produce un vertido, o dos”. “Tecnológicamente tenemos lo más avanzado del mundo y el mundo está perforando en el mar en todas las zonas que no son tan bonitas como Canarias pero sí parecidas. “No contemplamos accidentes, porque de ser así nos dedicaríamos a hacer hoteles”, apostilló.
En cuanto al inicio de sondeos junto a Canarias por el país vecino señaló que “lo que extraiga Marruecos nada tiene que ver con Canarias porque son dos plataformas diferentes”. Y añadió que “si alguien cree que hay connivencia entre el ministro José Manuel Soria y Repsol lo que tiene que hacer es ir al juzgado y denunciarlo. Si no va, preguntémonos por qué”.
El presidente de la petrolera aseguró que sondear a “3.000 metros no es una gran profundidad”, pues afirma que “Repsol es un experto en perforar en aguas profundas, incluso de 7 kilómetros”, como ocurre en Brasil y el Golfo de México. Avanzó que e su compañía hará dos pinchazos en “la cuadrícula Sandía, el primero a 1.955 metros de profundidad y el segundo a 3.092, en la que se espera extraer 330 millones de barriles de petróleo”, según informó Europa Press. En caso de no tener éxito, se llevará a cabo el proyecto Plátano, con una profundidad entre 2.380 y 3.465 metros, y donde se estiman 122 millones de barriles, y si fracasara, se pasaría Al proyecto Zanahoria, donde podría haber 107 millones de barriles.
La multinacional baraja extraer 110.000 barriles al día y estima crear entre 3.000 y 5.000 empleos: electricistas, marineros, administrativos, peones de puente o personal de seguridad… Brufau patentizó que no conoce “ningún país que renuncie a extraer hidrocarburos”, en alusión a la postura que mantienen el Gobierno canario y los cabildos y ayuntamientos de Lanzarote y Fuerteventura.
Oferta a la que los cabildos dicen no
El presidente de Repsol volvió a solicitar el apoyo de los cabildos de Lanzarote y Fuerteventura para establecer la base logística y operativa para sus sondeos, en los que invertirá unos 350 millones. “No quiero ni pensar que digan que no a la base logística, a pesar de que allí cuesta más caro, y si no quieren, buscaremos otro lugar”, advirtió. Varias empresas de esas islas pueden prestar todo tipo de servicios y proveer de suministros durante los 12 meses de sondeos”. Poco tardaron en responder le con un “no” los presidentes de ambos cabildos. Así, el de Fuerteventura, Mario Cabrera, dijo: “En Canarias llevamos 2.000 años sufriendo las invasiones y los saqueos de piratas y corsarios de todo tipo, y ahora nos toca toca luchar contra los piratas petroleros que vienen con chaqueta, corbata y maletín, a hacer promoción para condicionar al Tribunal Supremo en su sentencia, a chantajearnos con bases logísticas y prebendas. Pero son ilusos porque un pueblo no se compra con promesas de bases logísticas”. Por su parte, el presidente del Cabildo conejero, Mario San Ginés, afirmó: “Repsol tiene la batalla perdida y cuanto antes asuman que aquí no nos vendemos y que su única salida es que nos dejen en paz, pues mejor”. A su juicio, “el petróleo destruirá mucho más empleo que los escasos que pueda generar” en islas cuya economía se basa en el turismo.
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