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De Charco del Pino a los pies del Universo

   

Patricia Yurena Rodriguez

La granadillera ya cautivó a los jueces desde el primer desfile. / REUTERS

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz

“Ya en mi room…, asimilando todo lo vivido! Feliz por mi compi Molly, Gabriela Isler. Ella siempre se mostró perfecta y a mí me conquistó como persona, también al jurado. Se lo merecía! Miss Venezuela y yo cumplimos nuestro deseo! Terminamos juntas de la mano”. Así se expresaba en su Facebook la tinerfeña Patricia Yurena Rodríguez Alonso, horas después de finalizar segunda en el certamen de Miss Universo celebrado en el Crocus City Hall de Moscú.

La joven granadillera declaró sentirse “satisfecha” con su trabajo, “con el amor y apoyo que recibí de mis compañeras y todo el equipo de Miss Universo; con esas personas de todas partes del mundo que me decían que era su favorita. “¡Con la emoción tan grande! Gracias a todos los que han confiado en mí!”, subrayó Patricia Yurena, que llegó hasta el final junto a su amiga Gabriela Isler. Esta, de 25 años, 1,81 metros de altura y unas medidas perfectas de 90-60-90, consiguió coronarse como la reina de la belleza entre las 85 chicas presentadas procedentes de los cinco continentes.

A las puertas del título se quedó la aspirante tinerfeña, cuya simpatía y carácter alegre, además de su innegable atractivo, cautivó a los jueces desde el principio. La que fue Miss España en 2008 con 17 años, ya alcanzada la mayoría de edad pudo participar en el certamen internacional y salir por la puerta grande a los 23. Antes de todo eso, la joven de Charco del Pino ya había sido elegida reina de las fiestas de su barrio, de su municipio y de Tenerife, además de quedar entre las 15 primeras en Miss Mundo 2008, concurso celebrado en Johannesburgo. Miss Universo 2013 reunió a las féminas más espectaculares en esta competición, bajo cuya organización se encuentra el excéntrico magnate norteamericano Donald Trump. Precisamente Estados Unidos acumula el mayor número de títulos, un total de ocho. Y para levantar la expectación aún más y en contraste con las bajas temperaturas moscovitas, las candidatas desfilaron con una colección de bañadores Yamamay realizada para el concurso, que resumió los diferentes estilos de esta prenda que cumple 62 años de historia. El broche final lo puso un bañador valorado en un millón de dólares, que llegó al Crocus City Hall fuertemente custodiado y reservado a la flamante ganadora.

Patricia Yurena Rodríguez Alonso y la nueva Miss Universo, María Gabriela Isler

Gabriela Isler y Patricia Yurena (d), al final. / REUTERS

Al ritmo del grupo norteamericano Panic at the disco, Patricia Yurena mostró sus mejores atributos ya en el primer desfile de la noche: en bañador. Se mostró sexy y segura en la pasarela, lo que hizo que la cadena TNT la nominase como “la gran favorita de la noche”. No en vano, no hubo dudas cuando se escogieron a las primeras 10 finalistas, donde la española estuvo acompañada por las representantes de Filipinas, Reino Unido, India, Brasil, EE.UU., Ucrania, Ecuador, Venezuela y República Dominicana. El siguiente paso, el desfile en traje de gala, un deslumbrante traje de tul y lentejuelas, con un tono entre champán y blanco que la hicieron lucir elegante, resaltando su belleza, que la situó entre las cinco finalistas. “Las mujeres deben ser disciplinadas, saber adaptarse, responder…, complaciendo con su trabajo este importante cargo”, respondió a la pregunta de cómo deberían comportarse las féminas en la política.

Pese a los nervios, el jurado la incluyó en la terna final, junto a la ecuatoriana Báez y la venezolana Isler, que fue la única capaz de superar a una Patricia Yurena que con esta segunda plaza se pone a la altura de las mujeres españolas (Amparo Muñoz, Tita Cervera o Eva Pedraza), que han logrado hacer eco de su belleza más allá de nuestras fronteras.