Fuera del descenso

   

MARTÍN-TRAVIESO | Santa Cruz de Tenerife

El CD Tenerife le debía una esta temporada a la SD Eibar y se la cobró con creces en la tarde de ayer. Íñigo Ros y Ayoze Pérez fueron los artífices de la revancha que se tomaron los blanquiazules, que con este triunfo logran salir, por primera vez en la presente temporada, de los puestos de descenso. Una vez más, y ya es habitual en las últimas jornadas, el mejor del Tenerife fue el canterano Ayoze Pérez, quien ofreció la asistencia en el 1-0 y marcó el 2-0 con una maestría solo reservada para los futbolistas que están llamados a ser unos verdaderos cracks. Lo intenta todo y le sale todo. Está en estado de gracia y su equipo lo está aprovechando con creces.

El encuentro solo tuvo un dominador, el equipo local. Desde el principio controlaron el encuentro los de Álvaro Cervera. De hecho, Ayoze ya dio su primer aviso de lo que iba a ser su primorosa tarde cuando solo habían transcurrido cinco minutos de duelo. Irureta desvía con acierto el mano a mano que le había planteado el canterano, que se encontraba en una posición algo escorada a la izquierda. Posteriormente, en el minuto 16, otro canterano, Suso, también intentó batir al guardameta vasco, pero la suerte volvió a ser esquiva. Cumplido el minuto 24, Cervera se vio obligado a llevar a cabo la primera sustitución del encuentro. Bruno pidió el cambio debido a las molestias que le generó un esguince de tobillo, por lo que saltó al campo Iñigo Ros, pasando Aitor Sanz a desempeñar la tarea de central diestro. Al minuto de eso suceder, llegó el primer disparo entre los tres palos del cuadro armero, obra de Morales.

Superada la media hora de juego, Suso volvió a probar fortuna. Contra que monta Ayoze y sirve para Suso, quien golpea abajo pero no supera al acertado cancerbero eibarrés, quien a esas alturas era el mejor de los suyos.

La jugada polémica del encuentro se produjo en el 36, cuando a Raúl Navas le anulan un gol por una falta que le hizo a Aitor Sanz. Todo el Eibar se quejó amargamente de esta acción.

Pocos minutos después, resultó ser el Tenerife el que se adelantó en el marcador. Entraron en juego Suso, Ayoze y Ros en la jugada que supuso el 1-0. El de Taco la levantó para dejársela al de María Jiménez, quien entregó un pase al corazón del área que remató el navarro. Primer gol que anota Ros desde que es jugador blanquiazul, justamente ante su exequipo.

No hubo tiempo para más y el colegiado pitó el final de la primera parte. Tras el descanso, el míster del cuadro de Ipurúa ordenó el primer cambio: Capa se quedó en la caseta y entró al campo Urko Vera, quien originó más molestias a la zaga tinerfeña. Fruto del empuje de este jugador, los visitantes dispararon en unas cuantas ocasiones al portal defendido correctamente por Roberto. La ocasión más peligrosa fue un lanzamiento de Eizmendi, pero su disparo salió muy desviado.

Cervera reaccionó a tiempo y con solo un movimiento de sus piezas, logró devolverle el protagonismo a su conjunto. A Ayoze le pasó a la banda izquierda, mientras que Borja pasó a la delantera y Cristo a la mediapunta. El Tenerife recobró el control del juego y los problemas regresaron a la zaga visitante.

Fue un constante dolor de cabeza el atacante canterano, quien fabricó uno de los goles de la jornada en el minuto 59. Escorado a la derecha y cubierto por dos defensas, golpeó la pelota con dirección al vértice izquierdo de la meta de Irureta, quien tocó la pelota antes de que se alojara en su portería. Un golazo. Una maravilla con la que deleitarse una y otra vez.

Era la noche de Ayoze, no cabe duda. En el minuto 70 volvió a poner al público en pie con otro disparo desde lejos que Irureta tuvo que enviar a córner.

De ahí hasta el final del partido, el representativo no tuvo ningún sobresalto en zona defensiva y acabó el encuentro manteniendo su portería a cero, por tercera ocasión en los últimos cuatro partidos.

Una vez acabado el encuentro, se originó una disputa en el centro del campo entre Suso e Irureta. Los dos fueron amonestados por “encararse con un adversario sin llegar a la agresión ni al insulto”, según se recoge en el acta arbitral. Ya había visto una amarilla el de Taco, por lo que se perderá el duelo del próximo domingo en Soria contra el Numancia.