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Rodolfo León: «El PSOE nos ha castigado para mantener el pacto con CC»

Rodolfo León
El alcalde de Tacoronte y edil expulsado del PSOE, Rodolfo León. | MOISÉS PÉREZ

GABRIELA GULESSERIAN | Tacoronte

Confiesa estar muy ilusionado. No porque haya prosperado la moción de censura que le permite gobernar desde el 22 de octubre junto al Partido Popular (PP), sino porque el nuevo equipo de concejales trabaja como un único gobierno y no bajo la presión de unas siglas políticas. Destaca la actividad y la transparencia que existe y cita como prueba que se estén cerrando presupuestos “a una velocidad enorme”. Sin embargo, la situación con el partido no es tan idílica como la que mantiene con su socio de gobierno dado que tanto él como sus compañeros del PSOE, a excepción de Carlos Medina, fueron expulsados al desobedecer la orden de mantener el pacto con Coalición Canaria (CC). Una decisión que han recurrido ante la comisión de Ética y Garantías y de la que no tienen respuesta.

-¿Cuáles son sus principales objetivos como alcalde?

“Como grupo que somos junto al PP, hay una apuesta muy clara de desarrollar un plan de barrios que permita que todos estén dotados no sólo de alumbrado público y de obras, sino de ocio, parques infantiles, limpieza y reivindicaciones que no tienen tanto que ver con una cuestión económica sino con mejoras que son asequibles. Pero también con actividades relacionadas con la cultura, el deporte y la participación en las fiestas”.

-¿Se volverá a reactivar el consejo asesor para poder aprobar finalmente el PGO, que quedó dormido del anterior mandato?

“El borrador del reglamento de participación ciudadana, que ya fue enviado a las asociaciones de vecinos, contempla la creación de un consejo cívico, que tenga opinión en todos los temas que afecten a la ciudad, desde el urbanismo hasta la cultura, desde el cual se va a encarrilar el consejo asesor del PGO. Este órgano está creado y sólo hay que cambiar los interlocutores”.

-¿El PSOE hubiese estado dispuesto a ceder la alcaldía al PP?

“Era necesario era desatascar la situación en Tacoronte y en ese sentido, entendíamos que no era prioritario tener la alcaldía. Y la fórmula que propuso Teresa Barroso (PP) y que finalmente se aplicó no sólo es de agradecer sino que demuestra bastante madurez y una buena lectura de lo que el municipio estaba pidiendo a los grupos políticos”.

-¿Se encontró con muchas sorpresas al asumir a la Alcaldía?

“La relación anterior con CC no permitía que fluyera la información entre ambos grupos. Había una ralentización de determinadas actividades en todas las áreas que no entendíamos y que a partir de ahora tendrán salida. Una de ellas es el Mercadillo del Agricultor, que durante años ha tenido un éxito enorme y cuya regulación estuvo a punto de ponerlo en crisis. Es el ejemplo que no queremos que se vuelva a dar”.

-¿Este fue el detonante para que el PSOE rompiera el pacto con CC?

“Fue uno de los motivos. No puede ser que CC haya decidido de forma independiente sobre esta institución. Es como si el PGO lo aprueba el concejal de Urbanismo sin contar con el resto de la corporación. Un gobierno es compartir y es verdad que nos pilló por sorpresa la decisión de Álvaro Dávila, y por eso en ese momento se habló de una crisis en el pacto. Pero además, no se puede hablar negativamente de una institución del municipio que siempre ha reportado beneficios, no sólo a los agricultores sino también a los vecinos. Lo importante es que el Mercadillo ya se reunió con el grupo de gobierno y estamos revisando una serie de puntos con los cuales ni los agricultores ni nosotros estamos de acuerdo, para ver si antes de final de año podemos tener aprobado el reglamento”.

-¿Cuándo empezaron las discrepancias con Álvaro Dávila?

“Lo ocurrido con el Mercadillo del Agricultor nos llevó a revisar el pacto, pero en ese momento tanto el PSOE como CC no lo entendían así. Eso nos empezó a llamar la atención, porque si nuestro socio nos estaba dejando de lado en la toma de decisiones, el pacto no tenía un desarrollo claro y lo pusimos en conocimiento de nuestra dirección insular y regional. Luego hemos intentado reconducir la situación con una paciencia infinita, porque el partido nos decía que había que pelear por ese acuerdo para visibilizarse y ese ha sido el mandato que hemos cumplido hasta que no pudimos más. Nuestra decisión puede no ser compartida pero si hay una moción de censura que esté justificada en Canarias es la de Tacoronte, por una deslealtad del socio que tomó decisiones que pusieron en riesgo nuestra credibilidad. A nadie se le ocurriría llegar al extremo que ha llegado el PSOE de castigarnos doblemente para mantener el pacto de gobierno, es innecesario”.

-Usted siempre dijo que tenía el apoyo tanto de la insular como de la regional ¿Actualmente se siente respaldado a pesar de la decisión del partido de expulsarlo?

“Sí, tanto yo como mis compañeros nos sentimos respaldados. Pero es verdad que muchas de las personas que tienen que tomar una decisión temen la reacción de los órganos del partido. Yo no quiero mostrarme como valiente, pero nuestra situación era sobradamente conocida por éstos. Lo que no puede ser es que por un lado se nos pida resistir en un pacto y luego se nos abandone. El temor de ambas direcciones a respaldar nuestra decisión tendrán que explicarlo ellas. Nosotros ya lo hemos hecho”.

-¿Se siente socialista?

“Sí, porque no es una pretensión de expulsión o el intento de hacerlo sin las mínimas garantías lo que te hace abandonar unas siglas. Nosotros ni somos tránsfugas ni dejamos de pertenecer al PSOE, y estamos obligados a seguir afiliados mientras dura el proceso de alegaciones ante la Comisión de Ética y Garantías”.

-¿Cree que Dávila se encontraba más cómodo gobernando con su antecesor, Carlos Medina?

“Sí, y lo ha comentado. El pacto no puede ser entre personas al margen de las agrupaciones. Y eso es lo que no entendía Carlos Medina. Llegó un momento en el que se traían las cuestiones mínimas a la Junta de Gobierno y por eso entendimos que la agrupación no estaba bien representada”.

-Usted es el secretario de la agrupación local del PSOE que ahora va a ser intervenida por una gestora, ¿Qué hará?

“Nunca recomendaría a nadie que dimitiera del PSOE pese a lo ocurrido, todo lo contrario. Es más conveniente ahora que todo el mundo se movilice y opine. Esta decisión que hemos tomado no significa que el PSOE pierda fuerza en Tacoronte. Nuestra preocupación por la gestora que quiere montar la Regional es seria, porque queremos que represente a todos los afiliados, que no ofenda, que sea lo más consensuada posible y que no intente emitir una señal que violente. Y esperamos que así sea”.

-¿Qué pasará si finalmente prospera el recurso de CC para declarar no válida la moción de censura?.

“Lo que tenga que pasar, aunque ahora mismo no contemplo ese escenario. Entiendo que jurídicamente la moción de censura está lo suficientemente defendida, pero si así ocurre, tendré que asumirlo”.

-Sea sincero. ¿Confió desde el principio que salía adelante o hasta último momento tuvo sus dudas?

“Una vez presentada, lo único que resultaba interesante era una versión jurídica que estaba flotando, novedosa por la reforma de la Ley Electoral, pero era como haber cumplido con nuestra misión. Reconozco que hubo muchísima presión a nivel personal. No me preocupaba tanto el resultado sino la comprobación durante ese espacio de tiempo, de lo que las personas son capaces de hacer, decir y presionar. Eso sí me sorprendió, porque no era una moción que tuviera que ver con intereses espurios de ningún tipo sino con otros motivos. El nivel de presión sobre las personas se ha escenificado de manera muy desagradable”.

-Me imagino que se refiere al concejal socialista Juan García, a quien incluso Álvaro Dávila le dedicó unas palabras muy duras y reprocharle que lo había defraudado. ¿Sólo él recibió presiones?

“Fue muy desagradable. Álvaro Dávila hizo una afirmación sobre lo que pensaba de Juan García que era innecesaria. Lo que interesa en una moción de censura es saber por qué se presenta y no intentar derribar a una persona. No sólo Juan García recibió presiones, también muchos más compañeros. Pero bueno, son parte del juego”.

-Usted se estrena en política en este mandato, ¿teme que la decisión adoptada influya en su futuro?

“No me importa, lo tenía claro desde el principio. La propia organización nos lo advirtió y por eso nos pidió que aguantáramos, pero no lo hicimos porque eso supondría una actitud tibia ante los problemas. El compromiso lo tenemos con los ciudadanos de acuerdo a las demandas de nuestros votantes, que han aplaudido la decisión que hemos tomado. El tema de las siglas es lo de menos, aunque tampoco me planteo otras, eso que quede bien claro. Lo importante es no abandonar el partido, aunque éste te castigue, hay que pelearla desde dentro”.