Un año de cárcel para un acusado de seis delitos por los que pedían 16

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Un varón para el que pedían un total de hasta 16 años de prisión fue finalmente condenado a solo uno de cárcel, tal y como se recoge en la sentencia dictada a mediados del mes pasado por la Sección Quinta de la Audiencia provincial de Santa Cruz de Tenerife. El abogado defensor, Avelino Míguez, logró desbaratar las aludidas acusaciones, entre las que se incluían delitos tan graves como agresiones sexuales y detención ilegal.

Los hechos que nos ocupan y que sí se consideran probados relatan que policías locales capitalinos acudieron minutos después de las siete y media de la mañana del pasado 23 de julio por una llamada de socorro en la avenida de Benito Pérez Armas, donde hallaron a la víctima de este caso con evidentes signos de haber sido golpeada en la cara, y que el agresor era su expareja, que venía detrás.

Aunque el ahora condenado, que cuenta con varios antecedentes (entre ellos una sentencia firme por malos tratos) intentó huir de los agentes, estos le dieron alcance, aunque uno de los funcionarios sufrió una lesión en un codo.

Por lo que respecta a la víctima, presentaba diversos hematomas, tumefacción nasal, una quemadura en un muslo y varias equimosis (derrames internos de sangre a cuenta de golpes).

Sin embargo, la Fiscalía solicitó un año de prisión por los malos tratos, otro por un delito contra la integridad moral, cuatro más por detención ilegal y 11 meses, también de privación de libertad, por resistencia a la autoridad. Dichas penas fueron elevadas por la acusación particular, ya que añadió agresiones sexuales (cinco años de prisión), y permutó el contrario a la integridad moral por el de maltrato habitual (cuatro años), además de elevar la pena por el de resistencia a la autoridad a dos años de cárc

Floja declaración

Sin embargo y dicho en palabras del juzgador, la “carencia probatoria” hizo que prevaleciera la presunción de inocencia del acusado salvo en el caso de los malos tratos. A ello sin duda contribuyó la declaración de la víctima, de “contenido mínimo y con contradicciones”, mientras que sobre el incidente con los agentes se valora la declaración del acusado, que reaccionó de forma instintiva.