Con la solvencia de un líder

Pedro Toro intenta recibir un balón ante la oposición de un rival. / SERGIO MÉNDEZ

DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife

El Uruguay Tenerife y el Segovia Futsal ofrecieron este sábado un muy buen partido de fútbol sala que se decantó a favor del líder gracias a los dos goles de Carlos Corvo durante la primera parte. Fue un encuentro de mucho trabajo e igualdad que pudo haber terminado con un resultado muy amplio si no llega a ser por la actuación de los porteros.

En especial el local, Iago Barro, que durante la primera parte se convirtió en el jugador más destacado del equipo tinerfeño. Tras el descanso el balón no quiso volver a entrar en las porterías, ni siquiera en los últimos instantes, cuando los visitantes salieron de cinco. Tras la primera jornada de la segunda vuelta, el Uruguay se mantiene en el liderato de la competición con 31 puntos, seguido del Levante, con 30.

No fue un partido ni fácil ni brillante para el Uruguay Tenerife. El conjunto de Francis Arocas tuvo que echar mano de la solvencia que ha demostrado durante toda la competición regular para sacarlo adelante frente a un rival con mucho oficio, heredero de uno de los clubes más históricos del fútbol sala a nivel nacional y europeo. El conjunto segoviano demostró que está llamado a salir de los puestos de peligro que ocupa en la actualidad a poco que la suerte le acompañe. Y es que precisamente ayer no encontró fortuna ante el gol y se topó con un Iago Barro que, día a día, se consagra como uno de los mejores cancerberos de la categoría.

Barro estuvo a un nivel superlativo. El meta de la escuadra de Francis Arocas fue un muro para los segovianos que acabaron desesperados, sobre todo en la primera mitad del partido, ante la sensacional actuación de Barro que puso un candado a su portería que sólo supo abrir Iván.

Fue justo antes de que Carlos Corvo, autor también del primer tanto local a los cuatro minutos de iniciarse el compromiso, anotara el segundo y definitivo gol de los tinerfeños. Ya en la segunda mitad los locales pudieron aumentar la renta pero no tuvieron acierto goleador y los visitantes se vaciaron, incluso hasta jugando con portero jugador, para buscar una igualada que nunca llegó.