Cuarteto de cuerda de la Sinfónica de Chicago, durante su actuación en el centro capitalino. / DA
DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife
El programa Música Ciudadana de la Orquesta Sinfónica de Chicago, que tiene como finalidad promocionar los valores de la música, inundó el pasado domingo la sala grande del Centro Sociosanitario Santa Cruz, deleitando a las personas mayores residentes y a sus familias, y permitiéndoles participar de esta oportunidad única.
Este tipo de actuaciones solidarias responde a la convicción, manifestada en múltiples ocasiones por el director de la prestigiosa Orquesta, Riccardo Muti, de que la música tiene el poder de crear sociedades más fuertes y llevar la belleza y la esperanza a la vida de la gente.
El recital, que estuvo a cargo de un cuarteto de cuerda de la prestigiosa orquesta, impregnó las paredes del centro capitalino con maravillosas sinfonías, pertenecientes a Mozart, Dvorak y Albéniz, entre otros. Así, se desarrolló una conexión especial entre las concertistas y el público, escogido especialmente y con mimo para que, personas que no pueden asistir a un auditorio, disfruten de este hermoso privilegio que es la música. Los músicos explicaron a los presentes el motivo de las piezas elegidas y les acercaron a las biografías de los autores, y clausuraron la actuación con un tango.
El centro sociosanitario de la capital tinerfeña pertenece a la amplia red de recursos del Cabildo de Tenerife. Es gestionado por el Instituto Insular de Atención Social y Sociosanitaria (IASS).
La actuación contó con la presencia del vicepresidente primero y consejero de Bienestar, Sanidad y Dependencia, Aurelio Abreu, quien acompañó a los mayores en esta gratificante experiencia. “Son unos magníficos profesionales, que han tenido un gesto muy humano al venir a tocar para nuestros mayores y sus familiares”, manifestó.
Servicio prioritario
Una de las mayores preocupaciones del Cabildo es el bienestar de las personas mayores. Fruto de esta preocupación es que se haya ido creando a lo largo de los años una importante red de recursos destinados a atender a este colectivo.
El Centro Sociosanitario Santa Cruz cuenta con unas modernas instalaciones, y está ubicado en pleno corazón de la capital tinerfeña. Su infraestructura ha sido catalogada como “novedosa y singular”, pues se levanta sobre los cimientos del antiguo Hospital Militar, con entrada principal en la calle de Galcerán, albergando también las oficinas centrales del propio IASS.
El centro tiene un total de 180 plazas de alto requerimiento, 150 de ellas son residenciales y 30 de estancia diurna. Se trata del mayor centro sociosanitario de la Isla en sus características, diseñado para dar respuesta a una demanda cada vez más acuciante de atención especializada de calidad a personas con gran dependencia para las actividades de la vida diaria, a la vez que permite el respiro familiar.
En relación con las personas mayores, el IASS gestiona casi 2.000 plazas, en centros de atención sociosanitaria, de las cuales algo más de 1.400 están destinadas a la atención residencial, en establecimientos de naturaleza asistencial, sustitutivos del hogar, donde se procura la normalización de las condiciones personales del usuario.
El vicepresidente insular Aurelio Abreu, con los músicos estadounidenses. / DA
Dotaciones y prestaciones
Los servicios se prestan de forma temporal o permanente, en régimen de internamiento, atención y cuidado de tipo social y sanitario. Y el resto se destina a la atención diurna, atención integral durante el día, con el fin de mejorar o mantener su nivel de autonomía personal mientras permanece en su entorno y ambiente familiar.
Todas estas plazas responden a un proceso de especialización por niveles de atención, que se acometió en los últimos años. En este sentido se puede diferenciar entre los hospitales de larga estancia (Hospital Febles Campos, Los Dolores en La Laguna y Santísima Trinidad en La Orotava); plazas de alto requerimiento sanitario, que se gestionan de forma indirecta, a través de operadores especializados; plazas de medio requerimiento sanitario (a través del mismo modelo de gestión) y plazas de bajo requerimiento sanitario (que son las concertadas con entidades municipales en unos casos o fundaciones y organizaciones sin ánimo de lucro, en otras).