El hecho de que los duros de los duros de ETA, como dice el analista Luis R. Aizpeolea, asuman las vÃas polÃticas y rechacen la violencia constituye el broche final que le faltaba al proceso de desmantelamiento de ETA para su total credibilidad. Y asà lo corrobora la propia izquierda abertzale, que es la que lleva las riendas, al dar por hecho que el proceso de paz no tiene marcha atrás. Un nuevo comunicado de ETA avanzará hacia su final.
Cuando todo pase, sin descartar tensiones polÃticas y expresiones de sufrimiento de las vÃctimas, irá volviendo la polÃtica, de modo que el futuro de los presos sea más una cuestión individual que colectiva, una vez que ellos mismos acataron el sistema judicial y penitenciario de España, algo sin precedentes. Y la polÃtica abertzale tendrá dos ejes: el reconocimiento de Euskal Herria como sujeto polÃtico y el derecho a decidir. Quedará asà atrás medio siglo de terrorismo, con centenares de muertos y miles de heridos. Si el debate polÃtico de fondo -el derecho a decidir- no aflora más es porque quedan los flecos de la desaparición de ETA y también porque ese asunto ya no serÃa competencia del Foro Social, la organización que promueve el proceso de paz en el PaÃs Vasco junto a destacados mediadores internacionales. Sortu -nacer, surgir o crear en euskera-, considerado el heredero de la ilegalizada Batasuna, será el partido ya legalizado que ocupará el espacio central del nacionalismo vasco independentista, de momento a través de la coalición electoral Bildu.
La constitución de un Estado vasco en el marco europeo es su principal objetivo declarado. Su lÃder, elegido por las bases, es Arnaldo Otegi, pero al estar encarcelado por el caso Bateragune -nombre del partido que intentaba construir supuestamente por orden de ETA, en 2009-, sus compañeros dejaron el puesto de secretario general vacante hasta que llegue su libertad. Su liberación, pendiente de un hilo jurÃdico -¿es posible que un documento que no sirvió para ilegalizar a Bildu, sà sea válido para mantener en presión a Otegi acusado de ser dirigente de ETA?-, marcará una nueva etapa en la polÃtica del PaÃs Vasco, ahora dominada por el PNV.