Lo que está pasando en el Ayuntamiento de San Juan de la Rambla es un ejemplo de lo que no se debe hacer en política. Es un ejemplo de lo que no se puede permitir a unos representantes públicos. Un alcalde no puede mantenerse ni ser mantenido en el cargo, después de haber sido condenado por conducir borracho y haber provocado un accidente con heridos leves. El comportamiento del actual regidor ramblero, Tomás Mesa, tanto por las circunstancias del accidente como por lo ocurrido después, es intolerable y vergonzoso. Si Mesa tuviera un poco de ética hubiera presentado la dimisión la misma noche que reventó el alcoholímetro y casi provoca una desgracia, y mucho antes de que se la pidiera su propio partido, el PP. Pero igual de vergonzosa e impresentable es la actitud de sus socios en el Gobierno local, la AIS-CC. No han tenido el menor pudor en convertirse en cómplices del alcalde condenado con tal de seguir agarrados a la teta del poder.
Ni las amenazas de sus jefes de CC han servido para que los ediles de la AIS hayan actuado con dignidad y con responsabilidad hacia su Ayuntamiento y su pueblo, que no se merecen ni el alcalde ni el grupo de gobierno que les ha tocado por desgracia. Un gobierno que, no lo olvidemos, es fruto de una “traición” del propio Mesa a sus entonces socios del PSOE, que propició una moción de censura para apartar de la alcaldía a Fidela Velázquez. A la vista de que los partidos y los políticos no han sabido estar a la altura de lo que merece el pueblo de San Juan de la Rambla, esperemos que sean los vecinos rambleros, tanto los de arriba como los de abajo, los que dentro de dos años pongan en su sitio -fuera del Ayuntamiento- a semejantes personajes, indignos de ser sus representantes. Aunque, a la vista de antecedentes como el de Camps en Valencia, que a pesar de las condenas judiciales pudo revalidar su triunfo en las urnas, hay que pensar que, a veces, hay pueblos que tienen lo que se merecen… Pero no creo que San Juan de la Rambla se merezca ser conocido ahora como el pueblo del alcalde borracho…