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La Fundación de Juventud Ideo, condenada a pagar 7.465 euros

   

D. N. M. | Santa Cruz de Tenerife

La Fundación Canaria de Juventud Ideo ha sido condenada a pagar 7.465,816 euros, cantidad que resulta de sumar dos sentencias emitidas por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) que estiman sendos recursos de UGT.

Una de ellas se refiere a una reclamación de cantidad por parte de tres empleados de Ideo. En este conflicto, la Sala de lo Social del TSJC entiende que a los actores les asiste el derecho a percibir las diferencias salariales de las nóminas que realmente recibieron del 1 de enero al 31 de diciembre de 2008 conforme al convenio colectivo provincial de Oficinas y Despachos, con lo que debieron ingresar según las tablas del primer convenio de Ideo, y a que en 2009 se actualice su salario. Por ambos conceptos se les adeuda un total de 6.365,816 euros: 3.203 a uno de los trabajadores; 1.824,85 euros a otra y 1.337,956 al tercero. Contra esta resolución solo cabe interponer un recurso de casación para una unificación de doctrina.

Libertad sindical

En la otra súplica, UGT instaba a la declaración de vulneración del derecho a la libertad sindical por “dejación de la empresa en sus deberes de colaboración en la celebración de elecciones a representantes unitarios”. Por ello, la fundación deberá indemnizar a la central con 700 euros por daños morales. El tribunal añade 400 euros como importe de las costas del procedimiento.

El TSJC concluye que, “enterada de la convocatoria electoral promovida por UGT, la empresa omitió su deber de citar a los trabajadores integrantes de la mesa”. Esa “actitud antisindical” frustró las elecciones en el día fijado para la votación. Comisiones Obreras “aprovechó ese fallo para convocar elecciones”, a los dos meses. Entonces, UGT desistió de impugnarlas. Sí actuó, sin embargo, contra la “conducta” de la dirección de Ideo.

Constituida el 5 de marzo de 2001 por el Gobierno regional, la Fundación Canaria de Juventud Ideo es una entidad sin ánimo de lucro colaboradora en la atención integral de menores y jóvenes. Aparte de ejecutar e implantar programas educativos, “profundiza en el ámbito de la prevención del riesgo y el conflicto en el medio familiar y académico a través de su modelo de inserción sociolaboral”.