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Los primos de las primarias

   
José Miguel Pérez (PSOE) y Paulino Rivero (CC)

José Miguel Pérez (PSOE) y Paulino Rivero (CC), en la sesión de investidura de 2011. / SERGIO MÉNDEZ

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

El pacto secreto se está aplicando conforme a lo previsto. No lo han anunciado públicamente, pero Paulino Rivero y José Miguel Pérez pedalean para repetir el tándem electoral en 2015.

Si el presidente del Gobierno de Canarias fuera designado en junio por el máximo órgano de su partido entre congresos, el vicepresidente estaría obligado a someterse a las primarias (ampliadas a los no militantes). ¿Qué pasaría si el primero de ellos renuncia a presentarse? Lo más probable es que el segundo se aleje de la carrera. En ese hipotético escenario, se abriría un abanico que ventilaría el aire renovador en el PSOE.

El tercer supuesto sería que Rivero perdiera ante otra opción, con lo que en cierto modo quedaría desautorizado y la estabilidad del Ejecutivo de coalición se vería seriamente dañada. Sin embargo, al oficialismo socialista no le conviene que la crisis estalle antes de aprobarse los presupuestos autonómicos del próximo año. De ahí que, de concurrir a las elecciones internas, Pérez intente estirar el calendario para evitar trabarse con la cadena de la bicicleta y caer en mala posición. Es decir, que si no ganase la apuesta tendría que abandonar el banco azul. Sus propios compañeros les retirarían el crédito. A los dos. Y, como de costumbre, la alianza no agotaría la legislatura. En ese horizonte, los respectivos cabezas de lista harían campaña sin ataduras y con proyectos claramente diferenciados e ilusionantes al objeto de captar a los votantes desencantados.

Si bien el comité federal ha fijado septiembre como fecha para elegir candidatos a las presidencias de las comunidades autónomas y a las alcaldías en los municipios de más de 20.000 habitantes, la ejecutiva nacional podrá alterar la agenda cuando exista “una solicitud motivada de la dirección regional correspondiente”. En Canarias ya se han reservado virtualmente los meses de enero y febrero por si suena la campana. A tal fin, interesa que en noviembre resulte vencedora una propuesta para La Moncloa afín a Alfredo Pérez Rubalcaba. No en vano, el secretario de Organización, Óscar López, ha expresado a su paso por Gran Canaria y Tenerife el apoyo “sin fisuras” de la cúpula federal a la gestión de José Miguel Pérez y al acuerdo con los nacionalistas.   

Discutido en los foros internos, el liderazgo de Pérez está necesitado de cariño y las caricias son mano de santo cuando uno está de mal cuerpo. Las palabras de aliento actúan como un tónico reconstituyente, aunque envenenen las aspiraciones de quienes no se conforman con paños calientes y pretenden mandar al enfermo a casa para experimentar con medicinas alternativas. Que José Miguel Pérez sea un “político honesto, honrado, sensato y trabajador” no garantiza que se curen las heridas. Por mucho que tapone la hemorragia, la sangre hierve por dentro.

Conjeturas aparte, lo cierto es que el secretario general canario se está dejando querer y, a la chita callando, va extendiendo sus influencias. Entre sus eventuales contrincantes, uno que se excluye es el palmero Manuel Marcos Pérez, metido en un zarzal de mucho cuidado. A Gustavo Matos lo han tentado para que desista tras un paripé. Y los talibanes preparan una ofensiva.

Días contados


Vuelta y media

Rivero hace buenas migas con Díaz. Paulino Rivero viajó a Andalucía para ver a los equipos canarios en la Copa del Rey. De Málaga se trasladó a Sevilla, donde lo recibió Susana Díaz. Ambos presidentes se han unido en la defensa de un modelo de financiación más justo y equilibrado, convencidos de que el actual reparto perjudica a las respectivas comunidades autónomas. Con miras a poner en común sus coincidencias, van a crear grupos de trabajo. Después volverán a entrevistarse, esta vez en el Archipiélago, para evaluar su desarrollo. Quizá no se le escape a Paulino que Susana es la mujer de moda en el Partido Socialista.

El simulacro de la ministra de Empleo. La visita de Fátima Báñez a Canarias ha sido calificada de fraude por no reunirse con el Gobierno regional al día siguiente de conocerse que el número de parados inscritos en las oficinas de las Islas subió un 0,72% en enero, lo que supone 1.981 personas más respecto a diciembre. Báñez estaba invitada a un simulacro de los dos buques hospital del Instituto Social de la Marina. Desde el PSOE, la diputada Lola Padrón le echa en cara su “falta de respeto”.

Los trabajadores del ITC se rascan los bolsillos y salvan la empresa. El sacrificio de la plantilla del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) garantiza la viabilidad de la empresa pública y evita la ejecución del ERE, una solución siempre dolorosa.