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Rivero avanza que Canarias cumple con el déficit de 2013

   
Paulino Rivero, en la sesión de control.

Paulino Rivero, ayer en la sesión de control. / DA

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

Objetivo logrado. A falta de cerrar la contabilidad, Paulino Rivero avanzó ayer que la comunidad autónoma de Canarias terminó 2013 con un déficit que oscila entre el 1,1% y el 1,2% del PIB. Estaría por debajo, por lo tanto, del límite fijado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) celebrado en julio.

En respuesta a una pregunta del portavoz de Nueva Canarias, Román Rodríguez, en la sesión de control, el presidente del Gobierno regional aseguró que las cuentas públicas están “saneadas”. Además, enfatizó que su Ejecutivo “compatibiliza el cumplimiento de los criterios del Estado y con la cohesión social”.

En el reparto a la carta, el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas estableció un objetivo de estabilidad presupuestaria de -1,3% para el conjunto de las comunidades autónomas. Canarias quedó por debajo, con un déficit autorizado del 1,2%.

En la mencionada reunión del CPFF, el consejero Javier González Ortiz votó en contra al entender que no se respetaban indicadores individualizados como la tasa de desempleo, el nivel de renta, el sistema de financiación y el nivel de deuda.

El techo de gasto de la Administración regional para este año es del 1% del PIB; de 0,7% en 2015 y del 0,2% en 2016.

En su argumentación, Rodríguez vinculó el déficit a la financiación autonómica. Al respecto, lamentó que no se cubriera en 2012 y que “sobraran” 82 millones de euros “que pudieron ser dedicados a obras o a luchar contra la pobreza”. Rivero replicó que “el dinero no lo regalan”. El endeudamiento “hay que pagarlo”, resaltó el jefe del ejecutivo. “A mayor interés menor capacidad para mantener los servicios esenciales e impulsar la estrategia de crecimiento económico para mejorar la competitividad y activar el empleo”.

Después, José Miguel Barragán (CC) le dio pie para que volviera a reivindicar la reforma del modelo de financiación “a fin de que todos los ciudadanos perciban lo mismo para la atención de los servicios sociales”.