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Un pesquero halla frente a Punta Rasca el cadáver del windsurfista

   

DIARIODEAVISOS.COM | Santa Cruz de Tenerife

Un pesquero localizó en la mañana de ayer el cadáver de un varón frente a la costa de Arona que corresponde, tal y como posteriormente corroboró la Comandancia provincial de la Guardia Civil, al windsurfista de nacionalidad británica que desapareció en aguas de El Médano el jueves pasado.

Como recordarán los lectores, se trata de un turista de 64 años que en la mañana de la referida jornada se hizo a la mar tras alquilar el equipo necesario. Precisamente, la voz de alarma sobre su ausencia fue dada por la empresa que le facilitó el material tras comprobar que no había devuelto este.

Desde aquel instante se activaron los servicios de emergencias, que rastrearon la costa cercana, navegaron desde Montaña Roja (también en el municipio de Granadilla de Abona) hasta Adeje y sobrevolaron con el helicóptero del Grupo de Emergencias y Seguridad del Gobierno de Canarias esta parte de la Isla sin que los trabajos, interrumpidos al caer la noche el pasado viernes, dieran resultado.

Finalmente y cuando la luz del día ya había permitido reanudar las labores de rescate, el pesquero dio aviso del hallazgo y una embarcación de Salvento Marítimo se encargó de llevarlo hasta el puerto de Los Cristianos, donde se hizo cargo la autoridad judicial pertinente y desde ahí fue llevado al Instituto de Medicina Legal donde se le realizó la autopsia.

Ahora será la Guardia Civil la encargada de tramitar las oportunas diligencias, en las que sin duda figurarán de forma destacada el contenido de la autopsia, que será lo que aclare que motivó el funesto desenlace.

Cabe añadir que durante toda la semana de Carnaval la costa de El Médano, zona preferida por los amantes de los deportes náuticos, ha presentado una marejada importante, lo que ha motivado una inusitada actividad para los servicios de emergencias.

Así, en una de las jornadas se llegaron a contabilizar cuatro rescates, mientras que en otra se tuvo que auxiliar a otro practicante de windsurf y a uno de kite surf cuando ya estaban en Montaña Roja. Hasta la desaparición del británico, felizmente nadie había resultado lastimado.