GABRIELA GULESSERIAN | Santa Úrsula
El Pleno del Ayuntamiento de Santa Úrsula aprobó ayer una modificación presupuestaria por importe de 544.237 euros que permitirá abonar la deuda pendiente con la Mancomunidad del Nordeste (86.447 euros); el suministro de agua (177.459 euros) y el Plan de Cooperación del Cabildo de Tenerife (7.500 euros) para ejecutar obras en dos barrancos. El resto, unos 270.000 euros, será destinado a la convocatoria de subvenciones de este año a los clubes deportivos, la escuela de música, las comisiones de fiestas de los diferentes barrios y Cruz Roja. El Gobierno en minoría de PP-PSOE terminó aceptando la propuesta de la Agrupación Independiente de Santa Úrsula (AISU) para que esta cantidad se detraiga de dos partidas fundamentales; una que no se gastó destinada a la obra de la piscina municipal y al terrero de lucha, y otra pequeña parte de las áreas de Parques y Jardines, Urbanismo y Gastos Protocolarios.
La alcaldesa, Milagros Pérez (PP), criticó que la iniciativa de los nacionalistas se presentara dos días antes del Pleno y que “prácticamente no variara” respecto a la del interventor municipal, quien, a diferencia de AISU, sugirió que se sacara “un porcentaje igual” de todas las áreas. Pérez subrayó que pese a no estar de acuerdo, el grupo de gobierno le daba el visto bueno a la moción “por responsabilidad política”, ya que el pago de las subvenciones era un asunto que se abordó en el pleno de enero.
La regidora municipal recordó que antes de la sesión plenaria se convocó una comisión de Economía y Hacienda y, por lo tanto, “había unos días para estudiar los temas y llevar una propuesta”. Por ello, dijo, la oposición “tenía tiempo de sobra” para hacerlo y le reprochó a los ediles de AISU y los rebeldes “no tener responsabilidad política” pese a asistir a órganos colegiados por los cuales cobran. “Había que estudiar la propuesta antes y no alargar el proceso y echarle la culpa al Ayuntamiento que hizo su trabajo”, sentenció.
Los reproches entre PP-PSOE y AISU se prolongaron durante la hora que transcurrió el pleno. La alcaldesa llegó incluso a decir que llamó personalmente al portavoz nacionalista, Juan Acosta, para invitarlo a dicha comisión de la que no es miembro y a último momento le confirmó que no podía asistir. Pero este lo desmintió y explicó que en su trabajo solo tiene permiso para acudir a “convocatorias oficiales”.
Los rebeldes del PP, por su parte, se abstuvieron y dijeron que la situación actual era consecuencia de la prórroga de los presupuestos que no se habían consensuado con la oposición.