La secretaria general del Partido Popular, MarÃa Dolores de Cospedal, dijo el dÃa 10 que hay plazo hasta el 7 de abril para designar candidato del PP a las elecciones europeas, por lo que su partido no incurre en ningún retraso. Y tiene razón legal. Otra cosa es que su argumentación polÃtica se entienda por parte de los votantes, y menos aún a estas alturas, cuando las elecciones ya están convocadas por el Gobierno. Naturalmente, del PP.
Es, por lo demás, una curiosa manera de incentivar el interés por unas elecciones que de por sà ya suelen atraer menos que otras a los ciudadanos. Si de lo que se trata es de hacer pedagogÃa sobre Europa, en un momento clave para la UE y también para España, todo parece indicar que hay otras prioridades. Dicho en palabras llanas: ni se le está dando valor al proceso de cambio de la Unión Europea ni a los 54 representantes que aportará España a los 751 escaños que tendrá el Parlamento de Estrasburgo durante la legislatura 2014-2019. La indefinición del PP es aún más notoria en la medida que su principal adversario, el PSOE, ya designó candidata hace semanas, del mismo modo que hicieron los grandes partidos polÃticos europeos -incluido el PPE- a la hora de presentar a sus candidatos a la presidencia de la Comisión Europea. Pero Rajoy es asÃ, le cuesta decidir y elegir, incluso yendo al lÃmite de cumplir los plazos legales para unos comicios cuya campaña electoral comenzará el 9 de mayo y finalizará dos semanas después, el viernes 23, ya que las elecciones se celebrarán el domingo 25 de mayo. Tal vez influya en la posición del presidente del PP y del Gobierno la crisis que en paralelo abrirá en su gabinete, con lo cual estarÃa ganando tiempo para retrasarla lo máximo posible. Todo ello, suponiendo, claro está, que el candidato o candidata salga de las filas del Gobierno, ya que también podrÃa elegir a cualquier otra persona, aunque esa hipótesis no esté en el ambiente. En cualquier caso tendrÃa sobre la mesa el más que probable relevo del ministro de EconomÃa, Luis de Guindos, quien se perfila como futuro presidente del Eurogrupo, en 2015.
Del mismo modo que serÃa una sorpresa ver de candidato al PP a una persona que no está en las quinielas, podrÃa suceder lo mismo si opta por colocar a José Manuel Barreiro, portavoz del PP en el Senado, en el puesto de Luis de Guindos.