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Suspendido de manera cautelar el derribo del muro de San Telmo

   
obras derribo del muro de San Telmo, en Puerto de la Cruz

Los trabajos de mejora en el emblemático enclave portuense se iniciaron la pasada semana. / MOISÉS PÉREZ

GABRIELA GULESSERIAN | Puerto de la Cruz

La Justicia ha decidido paralizar de forma cautelar el derribo del muro de San Telmo, en Puerto de la Cruz, previsto en el plan de mejora y acondicionamiento del paseo. La decisión es consecuencia de las dos medidas cautelares y el recurso interpuesto por la plataforma ciudadana Maresía al Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Santa Cruz de Tenerife para solicitar que se suspendan las obras que se iniciaron la pasada semana, dado que considera que no se han tenido en cuenta los últimos informes remitidos al Cabildo de Tenerife, promotor del proyecto, que demuestran la importancia patrimonial e histórica de este enclave del municipio y del muro característico a efectos de evitar su derrumbe.

El citado juzgado ha adoptado esta medida atendiendo las circunstancias “de especial urgencia” dado que las obras ya se iniciaron, según las fotografías que Maresía añadió a sus escritos, “sin oír a la parte contraria”, en este caso el Cabildo, que ha sido convocado junto a la plataforma para presentar de forma escrita sus alegaciones, a efectos de que la Justicia pueda resolver de manera definitiva el levantamiento, mantenimiento o modificación de la decisión. El plazo para hacerlo finaliza hoy.

La Justicia también ha tenido en cuenta el recurso interpuesto por Maresía para declarar ilegal las obras y que se pare el proyecto, que dejaría de tener efecto si se procede al derribo del muro, como está previsto, y posteriormente se acredita que “goza de cualidades que deberían impedirlo”, como entiende la plataforma ciudadana.

El escrito, con fecha de 21 de marzo, fue recibido el lunes por la tarde por los miembros del colectivo, quienes lo valoran y esperan que la decisión judicial “sea definitiva”.

Maresía insiste en que acudió a la Justicia porque surgieron nuevas pruebas que demuestran la huella del prestigioso artista lanzaroteño César Manrique en el paseo y la importancia histórica y patrimonial del muro, que no han sido tenidos en en cuenta por parte de la comisión insular de Patrimonio. El primero de ellos está realizado por el historiador Nicolás González Lemus en el que se incluyen pruebas para declarar bien de interés cultural (BIC) a este enclave y el segundo está avalado por el Departamento de Conservación de la Fundación César Manrique.