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Farmacias isleñas estudian vender medicamentos a través de Internet

   
Muchas farmacias canarias ya cuentan con página web. / DA

Muchas farmacias canarias ya cuentan con página web. / DA

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

El mercado global en el que vivimos, favorecido por el avance de las nuevas tecnologías y el desarrollo de Internet, ha hecho que cada vez sea más complicado controlar el lado oscuro de esa aldea universal en la que se ha convertido la red de redes. En algunos campos, como el de la sanidad, ese tráfico ilegal no solo tiene un elevado coste económico, también conlleva graves riesgos para la salud de miles de personas. De hecho, en un informe publicado hace unas semanas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó de que más de la mitad de los fármacos que se venden por Internet son falsos.

Para evitar este lucrativo negocio, la UE aprobó en junio de 2011 una Directiva por la que se establecía un código comunitario de medicamentos de uso humano, en lo relativo a la prevención de la entrada de medicamentos falsificados en la cadena de suministro legal. Para desarrollar esa norma se creó un grupo de trabajo formado por expertos de distintos países, entre los que se encuentra la secretaria del Colegio Oficial de Farmacéuticos de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Alicia Wildpret. Según explica a este periódico, aquella directiva se tomó como base del Real Decreto 870/2013, de 8 de noviembre, por el que el Gobierno regula la venta a distancia al público, a través de sitios web, de medicamentos de uso humano no sujetos a prescripción médica, que incorpora el contenido de la Directiva de Medicamentos Falsificados en este punto al derecho español.

Este nuevo marco legal, como subraya Wildpret, abre la puerta a que las farmacias puedan dispensar medicamentos a través de Internet, algo que ya están estudiando algunas oficinas del Archipiélago. “El consumidor podrá comprar en webs con el sello de la administración, podrá adquirir fármacos y sabrá que son legales”, recalca la secretaria del colegio tinerfeño, quien deja claro que “el mercado no legal en Internet es falso, porque los distribuidores y fabricantes autorizados solo venden a través de los canales legales”.

Una vez desarrollada y reglamentada la nueva ley, las farmacias podrán optar al sello de calidad europeo, cuyas condiciones y requisitos se están ultimando, “y solo faltaría trasponer la directiva a la legislación nacional y autonómica”, denota Alicia Wildpret, quien insiste en que “solo podrán vender fármacos en la red aquellas oficinas que tengan el referido sello de certificación, validado por la Agencia Española del Medicamento y el Ministerio de Sanidad”. Esta práctica se da ya en países como Holanda, donde existen farmacias con páginas webs autorizadas para vender fármacos, pero únicamente dentro del país, “porque si lo hicieran fuera entrarían en colisión con otras leyes nacionales”, expone la secretaria del Colegio de Farmacéuticos de Tenerife.
Muertes atribuibles

Actualmente, muchas webs venden medicamentos, e incluso algunas ofrecen supuestas garantías y sellos de calidad, pero se trata de una seguridad mercantil, nunca sanitaria. “En España no existen vías legales ni seguras para adquirir un medicamento a través de Internet”, insiste Alicia Wildpret, quien advierte de que “con las cosas de la salud no es conveniente saltarse las normas, porque las repercusiones pueden ser muy graves”. No en vano, la OMS asegura que cada año se producen “miles de muertes” por culpa del tráfico ilegal y las falsificaciones de fármacos.
“Al igual que el volumen de negocio, tampoco el número de muertes atribuibles a los medicamentos falsificados se conoce con exactitud, pero los costos que entraña para la salud pública son enormes. Aparte de su efecto directo en las persona, estos productos pueden causar resistencia a medicamentos indicados para atacar causas importantes de mortalidad: un ejemplo destacado es el paludismo, enfermedad que se cobra alrededor de un millón de vidas cada año”, concluye Alicia Wildpret.

Claves del decreto

Requisitos. La dispensación deberá ser realizada con la intervención de un farmacéutico, desde su oficina de farmacia, previo asesoramiento personalizado. El Real Decreto de Venta de Medicamentos a Distancia describe la forma en que ha de realizarse la dispensación y la entrega del producto para respetar este principio.

Inspección. Las comunidades autónomas desarrollarán, en el ámbito de sus competencias, las inspecciones necesarias para asegurar el cumplimiento de lo previsto en el Real Decreto, en relación con los sitios web de las oficinas de farmacia ubicadas en su ámbito territorial. La Agencia Española del Medicamento realizará las actuaciones inspectoras que procedan de acuerdo con sus competencias.

Registro de productos. Durante un plazo de al menos dos años tras la dispensación, se mantendrá en las farmacias un registro de los pedidos suministrados, con referencia a la identificación del medicamento, la cantidad dispensada, la fecha de envío, los datos del comprador, incluyendo la dirección de entrega y el responsable de la dispensación.

Información. El Real Decreto de Venta de medicamentos por Internet prevé que también la Agencia Española del Medicamento, en coordinación con las comunidades autónomas, debe desarrollar campañas de información sobre los peligros de los medicamentos falsificados.